Un colapso mayor y una crisis social se mantiene latente el municipio metropolitano de Escobedo, donde el 90 por ciento de los habitantes de esa población han padecido hasta siete días sin el suministro de agua.
El Alcalde de Escobedo, Andrés Mijes, acudió hasta la oficina central de la paraestatal Agua y Drenaje de Monterrey para reclamar el incumplimiento del abasto de agua.
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“Lo único que pido es que se cumpla con el horario de entrega de seis horas diarias, que no yaya retrasos, no pido compensación”, reclamó el edil, que posteriormente fue recibido por funcionarios estatales.
Mijes mencionó que, en Escobedo, al norte de la zona metropolitana regiomontana cuenta con 400 colonias, pero el 90 por ciento de ellas, unas 360 cuentan con problemas graves de incumplimiento de abasto de agua, en tanto tienen hasta siete días son una gota del líquido.
El Ayuntamiento ha correspondido con seis o siete pipas y la instalación de grandes tanques en diversos sectores, pero sin agua, no se pueden llenar.
Después, el Alcalde se trasladó al Congreso Local donde entregó una propuesta para exigir a los diputados que se reoriente el Presupuesto de Egresos y se asignen partidas emergentes para solucionar el problema.
Mijes considera necesario que el Congreso y el Ejecutivo estatal definan de donde sacar recursos para la compra de tinacos y pipas e, incluso, para subsidiar el servicio.
“General Escobedo ha sido uno de los municipios más afectados a nivel estatal, no sólo en la cantidad volumétrica del agua proporcionada, sino en la suspensión prolongada e injustificada del suministro, resultando alarmante que casi en la totalidad de las colonias no se ha respetado ni la periodicidad ni el horario de abastecimiento (indispensable enfatizar que se llevan más de 7-siete días consecutivos sin agua), recibiendo constantes quejas y reportes”, comentó.
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El Alcalde de Escobedo urgió una respuesta a su petición para que el Congreso exhorte a Agua y Drenaje y reevalúe y rediseñe la estrategia para el abastecimiento y suministro del líquido a los municipios, antes de una crisis social mayor que no podrá detenerse.
