JIQUIPILAS. De no atenderse de manera casi inmediata, el problema que viven los moto-taxistas jiquipiltecos podría terminar en un enfrentamiento con resultados fatales.

Lo anterior, por lo sucedido ayer jueves en pleno centro de este valle, donde un grupo de moto-taxistas permisionados le cerraron el paso a otro, al mismo que no dejaron que siguiera circulando y rentado el servicio de pasaje, bajo el argumento de que era irregular.

Antes de la una de la tarde, en la 1ª norte entre 2ª y 3ª oriente, decenas de estos vehículos se apoderaron de la calle, y una vez que retuvieron un moto-taxi blanco, buscaron la forma de que el delegado de trasporte (Roberto Tovilla Sílias) o personal a su cargo llegaran a ellos para que le entregaran esa unidad.

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Cuando la grúa y los supervisores arribaron a la dirección citada, las cosas se pusieron color de hormiga, un grupo de personas impedían que subieran el moto-taxi a la plataforma, y otro grupo, exigía que se la llevaran, diversas corporaciones policíacas tuvieron que intervenir para evitar que algo más grave sucediera, porque las cosas estaba muy tensas.

Después de varios minutos de acalorada discusión, ambos grupos acordaron que la grúa se llevara dos unidades, una amarillo con café y una blanca, y en la delegación de transporte región II valle-zoque, ahí se confirmaría con documentos originales, que unidad era pirata y cual no.

Los encargados del orden afirmaron que tomarán este problema más en serio y en los próximos días tendrán retenes alrededor de la ciudad para asegurarse que no existan más mototaxis piratas, pues de igual forma, aseveraron si todos están controlados disminuye la posibilidad a que existan asaltos dentro del vehículo o que manejan con exceso de velocidad para burlar a los uniformados.

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