Ocosingo.- Una tragedia que conmovió a la comunidad de Ocosingo llegó a su conclusión el miércoles, cuando las autoridades confirmaron el hallazgo del cuerpo de Arturo Adrián Bautista Urbina, quien valientemente se lanzó al río Jataté para salvar a sus dos hijas, un acto heroico que lamentablemente le costó la vida.
El fatídico incidente tuvo lugar el pasado sábado 7 de octubre cuando Arturo Adrián y su familia se dirigieron al río para disfrutar de un día de recreación. Sin embargo, lo que debía ser un día de diversión se convirtió en una tragedia inimaginable cuando sus hijas quedaron en peligro en las turbulentas aguas del río.
También puedes leer: Tragedia en Ocosingo: Mueren dos personas en el río Jataté por salvar a sus sobrinas
Sin pensarlo dos veces, Arturo Adrián se lanzó al río junto con su primo Esaú en un esfuerzo desesperado por salvar a las pequeñas. Trágicamente, ambos hombres perdieron la vida en el proceso. El cuerpo de Esaú fue encontrado cerca del lugar del accidente el mismo día de la tragedia, a escasos 250 metros de su punto de partida.
Sin embargo, la búsqueda de Arturo Adrián se prolongó durante varios días debido a las difíciles condiciones climáticas y al elevado nivel del río, que complicaron las labores de rescate. Para intensificar la búsqueda, se unieron a las operaciones de búsqueda y rescate elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y la Policía Estatal.
Las autoridades de Protección Civil informaron el lunes pasado sobre los desafíos que enfrentaban debido a las condiciones adversas, pero dejaron claro su compromiso de continuar la búsqueda hasta encontrar a Arturo Adrián.
Finalmente, la tarde del miércoles marcó el triste final de esta búsqueda desgarradora, ya que las corporaciones de rescate lograron encontrar el cuerpo sin vida del valiente padre en las inmediaciones de la comunidad de Santa Clara en Ocosingo.
La familia confirmó la identidad de Arturo Adrián, permitiendo que los servicios periciales realizaran el levantamiento del cuerpo. Luego, se espera que se siga el protocolo legal correspondiente y se entreguen los restos a la familia para su cristiana sepultura.