Su cuerpo sin vida y el de cuatro acompañantes más habrían quedado tendidos sobre el pavimento tras la balacera registrada el pasado miércoles en la capital del estado de Chiapas.

Su nombre es Gilberto Rivera Beltrán alias El Gilito o El Junior, jefe de plaza del Cártel de Sinaloa en el estado e hijo de Gilberto Rivera Amarillas alias Tío Gil, de quien heredó el control desde Comitán, todo Chiapas y hasta Sudamérica.

El Tío Gil, hombre confianza de El Chapo, fue detenido en el 2016 en el Aeropuerto Internacional de Guatemala "La Aurora", por parte de agentes de la Policía Nacional Civil y posteriormente extraditado a los Estados Unidos por tráfico de drogas.

En ese país se le acusó también de conspiración y de seis cargos relacionados con la distribución de cocaína.

En 1999, la policía municipal de Mexicali, BC, detuvo al capo, pero quedó en libertad. En diciembre del 2004, en Culiacán, Sinaloa, Gilberto Rivera y sus hijos Jesús Gilberto Rivera Beltrán de 17 años en ese entonces, y Édgar de 15 sufrieron un ataque a balazos.

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Al Cártel de Sinaloa se le atribuyó en esos años una ola de violencia, cobro de piso, ejecuciones, robos, asaltos y secuestros, principalmente en la frontera sur del estado.

El último mapa de cárteles dado a conocer por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) muestra la presencia en el estado del Cártel Jalisco Nueva Generación, Cártel del Pacífico y el Cártel del Golfo.

El Junior presuntamente habría heredado la plaza a raíz de la detención de su progenitor y por más de 5 años mantuvo el control en las principales ciudades del estado.

Rivera Beltrán estaba casado con una joven ex participante en un concurso de belleza chiapaneca.

Hasta la noche de ayer autoridades estatales y federales mantenían en reserva la confirmación de las identidades de los muertos en la balacera.