Berriozábal.- En un intenso operativo, efectivos de la policía municipal no permitieron que las calles volvieran a ser ocupados por ambulantes, retirando a todos aquellos que ya habían colocado sus puestos para ventas.
A pesar de que en un principio se logró ver cordialidad en la acción de desalojo, hubo comerciantes que no estuvieron conforme con el actuar de las autoridades, por lo que de inmediato comenzaron las agresiones contra los uniformados, motivo por el cual debió ingresar el equipo antimotines.
El grupo de oficiales se posicionó de la avenida central y comenzaron a exigir a los ambulantes su retiro, permitiéndoles que por ellos mismos retiraran su mercancías y se fueran del lugar.
Ante esta situación, se debió cerrar la arteria principal que conecta al centro de la ciudad, hasta que los ambulantes fueron retirados de la zona, quedando despejada la vía.
Autoridades informaron que en esta acción no se reportaron personas lesionadas ni oficiales heridos, pues a pesar de que hubo algunos altercados con comerciantes que mostraron su inconformidad a través de la violencia, se evitó que el hecho pudiera pasar a mayores, llevando a una conciliación en la que no fue necesaria la fuerza pública, refirieron.
En tanto reiteraron que ya se tiene acuerdos con los locatarios de los mercados de la zona para que no se permita el ambulantaje y exista un desorden en el centro de la ciudad, por lo cual afirmaron que policías continuarán con recorridos para evitar que el comercio informal ocupe las banquetas o calles de la zona centro.
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