Una mujer indígena fue localizada sin vida con impactos de bala en el rostro, cerca del rancho La Granada del municipio de Amatenango del Valle alrededor de las 23:30 horas del miércoles, cuando fue reportado el hallazgo a las autoridades locales.
Los habitantes de esa comunidad manifestaron que en el camino de terracería que conduce al mencionado rancho, pudieron percatarse del cuerpo de la mujer que vestía prendas tradicionales de los altos y fue identificada como Estepona L., de 43 años de edad.
De manera inmediata avisaron a los socorristas de Protección Civil de Amatenango, quienes no acudieron, y fue el personal de la misma corporación, pero de Teopisca que llegó al auxilio.
Los paramédicos después de examinarla, informaron a los familiares que la mujer ya no tenía signos vitales y habitantes del lugar, todos simpatizantes del EZLN, se molestaron mucho por lo ocurrido y retuvieron a los elementos, cerrándole el paso a la ambulancia con dos vehículos, y argumentando que querían que las autoridades se presentaran y resolvieran este asesinato.
En el sitio al parecer han ocurrido otros hechos violentos y por ello las personas portaban armas de fuego y se posesionaron del rancho e incendiaron un mototaxi, para después detener también a Miguel B. B., de 75 años de edad, propietario del rancho.
El presidente municipal de Teopisca, Abel Tovilla, se comprometió a apoyar a los deudos con en los gastos fúnebres y logró dialogar con los pobladores, por lo que se consiguió que los paramédicos Guadalupe del Carmen G., Édgar Gabriel Z., Roberto Alexander y Miguel Ángel L. fueran liberados luego de estar toda la noche retenidos.
Hasta el cierre de esta edición, los inconformes mantenían retenido al dueño del rancho, asimismo, trascendió que tampoco permitieron la entrada de agentes ministeriales de la zona Indígena para dar fe de lo ocurrido, ya que por usos y costumbres los lugareños levantaron el cadáver para hacer una ceremonia fúnebre.
Tras la intervención y diálogo del presidente de Teopisca, los cuatro socorristas retenidos fueron liberados, pero el propietario del predio no fue puesto en libertad.