/ miércoles 6 de septiembre de 2017

¿Por qué los huracanes son cada vez más potentes?

Dichos fenómenos son cada vez más fuertes

Los huracanes como Irma, que golpeó este miércoles el Caribe, se alimentan de la energía que desprenden los océanos y por ello, con el aumento de las temperaturas, los científicos creen que su potencia aumentará, aunque no su frecuencia.

 

 

 

Siglo XX: incertidumbres

A falta de datos satelitales a escala planetaria anteriores a 1970, es imposible saber cómo evolucionó la actividad ciclónica en el siglo XX. Antes de la instalación de un seguimiento por satélite completo, incluso ciclones muy intensos pudieron pasar desapercibidos si no tocaron tierra, por ejemplo. De ahí la prudencia de los científicos.

En el Atlántico norte, desde hace una veintena de años se constató un aumento de la frecuencia de los ciclones, al contrario que entre 1970 y 1995, según Franck Roux, de la universidad Paul-Sebatier de Toulouse (suroeste de Francia).

En esta región, los investigadores notaron que la actividad ciclónica sigue ciclos de varias decenas de años y consideran que aún no es posible decir si el aumento del número de ciclones en la zona se debe a una variabilidad natural o al cambio climático.

En el Pacífico noroeste hubo una ligera disminución de la actividad ciclónica entre 1980 y 2010.

Siglo XXI: más intensidad

Los modelos informáticos que simulan el clima del siglo XXI revelan un posible aumento de la intensidad de los ciclones (vientos y lluvias), y un posible descenso de su frecuencia en el planeta.

"Los ciclones con una intensidad mayor son una de las consecuencias esperadas del cambio climático", explica Valérie Masson-Delmotte, miembro del GIEC, grupo de referencia sobre el clima a nivel mundial.

"Cuanto mayor es la temperatura del agua y el nivel de humedad, mayor puede ser la intensidad del ciclón. Ahora bien, estos dos elementos son más intensos debido al aumento del efecto invernadero", afirma la climatóloga. "Consideramos que hay un 7% de humedad más en la atmósfera por cada grado de calentamiento", precisa.

 

 

 

Nivel del mar: todavía más alto

El aumento del nivel de los océanos es una de las señales del calentamiento del planeta. Esta subida, variable según las regiones del globo, tuvo una media de 20 cm en el siglo XX y podría alcanzar hasta casi un metro en 2100.

A la vez, los ciclones producen también un oleaje que genera "mareas de tormenta". Los dos efectos combinados contribuirán a poner en riesgo a más poblaciones y construcciones costeras.

¿Hacia un desplazamiento de los ciclones?

Varios estudios muestran, según Météo France (servicio meteorológico de Francia), que "la latitud a la que los ciclones alcanzan su máxima intensidad se ha desplazado hacia los polos durante los últimos 35 años, en los dos hemisferios".

Esto podría estar relacionado con la expansión del cinturón tropical, es decir de las zonas de una parte y de otra del ecuador terrestre donde reina un clima cálido y húmedo.

"Lugares que están más habituados y mejor preparados frente a los ciclones podrían estar menos expuestos y otros, menos preparados, podrían estarlo más", según James Kossin, de la Agencia Estadounidense Oceánica y Atmosférica (NOAA).

 

 

 

/afa

Los huracanes como Irma, que golpeó este miércoles el Caribe, se alimentan de la energía que desprenden los océanos y por ello, con el aumento de las temperaturas, los científicos creen que su potencia aumentará, aunque no su frecuencia.

 

 

 

Siglo XX: incertidumbres

A falta de datos satelitales a escala planetaria anteriores a 1970, es imposible saber cómo evolucionó la actividad ciclónica en el siglo XX. Antes de la instalación de un seguimiento por satélite completo, incluso ciclones muy intensos pudieron pasar desapercibidos si no tocaron tierra, por ejemplo. De ahí la prudencia de los científicos.

En el Atlántico norte, desde hace una veintena de años se constató un aumento de la frecuencia de los ciclones, al contrario que entre 1970 y 1995, según Franck Roux, de la universidad Paul-Sebatier de Toulouse (suroeste de Francia).

En esta región, los investigadores notaron que la actividad ciclónica sigue ciclos de varias decenas de años y consideran que aún no es posible decir si el aumento del número de ciclones en la zona se debe a una variabilidad natural o al cambio climático.

En el Pacífico noroeste hubo una ligera disminución de la actividad ciclónica entre 1980 y 2010.

Siglo XXI: más intensidad

Los modelos informáticos que simulan el clima del siglo XXI revelan un posible aumento de la intensidad de los ciclones (vientos y lluvias), y un posible descenso de su frecuencia en el planeta.

"Los ciclones con una intensidad mayor son una de las consecuencias esperadas del cambio climático", explica Valérie Masson-Delmotte, miembro del GIEC, grupo de referencia sobre el clima a nivel mundial.

"Cuanto mayor es la temperatura del agua y el nivel de humedad, mayor puede ser la intensidad del ciclón. Ahora bien, estos dos elementos son más intensos debido al aumento del efecto invernadero", afirma la climatóloga. "Consideramos que hay un 7% de humedad más en la atmósfera por cada grado de calentamiento", precisa.

 

 

 

Nivel del mar: todavía más alto

El aumento del nivel de los océanos es una de las señales del calentamiento del planeta. Esta subida, variable según las regiones del globo, tuvo una media de 20 cm en el siglo XX y podría alcanzar hasta casi un metro en 2100.

A la vez, los ciclones producen también un oleaje que genera "mareas de tormenta". Los dos efectos combinados contribuirán a poner en riesgo a más poblaciones y construcciones costeras.

¿Hacia un desplazamiento de los ciclones?

Varios estudios muestran, según Météo France (servicio meteorológico de Francia), que "la latitud a la que los ciclones alcanzan su máxima intensidad se ha desplazado hacia los polos durante los últimos 35 años, en los dos hemisferios".

Esto podría estar relacionado con la expansión del cinturón tropical, es decir de las zonas de una parte y de otra del ecuador terrestre donde reina un clima cálido y húmedo.

"Lugares que están más habituados y mejor preparados frente a los ciclones podrían estar menos expuestos y otros, menos preparados, podrían estarlo más", según James Kossin, de la Agencia Estadounidense Oceánica y Atmosférica (NOAA).

 

 

 

/afa

Local

Migrantes buscan arriendos, se niegan a irse a los albergues y salir de los parques

Migrantes enfrentan largos tiempos de espera para regularizar su situación, lo que retrasa su salida y aumenta su vulnerabilidad

Local

La población tiene temor por la inseguridad en Tuxtla Gutiérrez

Inseguridad en Tuxtla Gutiérrez: El miedo de los ciudadanos a salir

Local

Cochito horneado, tradición navideña de los tuxtlecos

Cochito horneado como tradición y sabor que une a las familias tuxtlecas en Navidad

Local

Colectivo 50+1 Chiapas alza la voz por las 33 víctimas de feminicidio en el año

Guillén Hernández anunció que trabajan para establecer espacios permanentes en radio y televisión

Local

Violencia en Tuxtla Gutiérrez ha dejado siete muertes en noviembre

Al menos cinco homicidios dolosos y dos feminicidios se han registrado durante noviembre en la capital chiapaneca

Doble Vía

¿Por qué a la planta se le llama "Lengua de suegra"?

La fascinante "Lengua de Suegra": una planta decorativa con múltiples beneficios