Especialistas del Instituto de Biología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) estudian piezas de flores fósiles incrustadas o embebidas en ámbar en Chiapas, el propósito es identificar de qué flores se tratan, a qué familia de flora pertenecen, los años de esplendor y en qué territorio para entender la historia de la biodiversidad.
La doctora Laura Calvillo, explicó que estas especies podrían tener su contraparte en el periodo actual, en estas flores a veces encontramos asociaciones o interacción con los animales, conocer los caracteres morfológicos de plantas y animales para poder llegar a una probable identificación porque no podemos encontrar exactamente la especie.
Seguramente habrá grandes aportaciones el Herbario Nacional de México, una colección científica de plantas que resguarda una gran historia de la biodiversidad, probablemente ayudará a realizar algunas comparaciones con las plantas actuales, son cuatro las piezas en estudio en el Museo de Paleontología de la Secretaría del Medio Ambiente e Historia Natural.
Se analizará cada uno de los caracteres de cada florecita a manera de podamos describirlas y poder compararlas con las actuales, identificar sus posibles familias, se han tomado muestras fotográficas de las piezas demasiadas pequeñas, de 3.5 milímetros, el enfoque es muy difícil debido a que la resina rebota la luz y no permite que se pueda ver de fondo lo que se desea observar.
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Será un proceso complicado por el diminuto tamaño de la pieza a estudiar, se habrá de describir las distintas partes de la morfología, filamentos y se hará una vectorización de los ejemplares para conocer la interacción que había entre plantas e insectos, conocer su conexión orgánica para llegar a posibles familias, las piezas se encontraron entre las mil 300 piezas fósiles resguardadas en el Museo de Paleontología.
Las piezas incrustadas probablemente tienen 23 millones de años, el tiempo de la investigación será extenso, es complejo la identificación por el mundo muy diverso de las flores, no sabemos cuando podríamos concluir los estudios, la paleobotánica es compleja, en Chiapas no hay muy expertos, pero los resultados harán una gran aportación para la entidad en materia de flora y su historia.
