Tuxtla Gutiérrez, Chiapas - La capital del estado de Chiapas, Tuxtla Gutiérrez, se encuentra en alerta ante la falta de lluvias en los últimos días, lo que podría cambiar drásticamente a medida que se acerca el frente frío número ocho y la posible tormenta tropical Pilar. Según el Procedimiento Estatal de Alerta por Lluvias (PROCEDA), la Zona Metropolitana y varias regiones del estado se preparan para enfrentar condiciones meteorológicas extremas en los próximos días.
Según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), se espera que el frente frío número ocho avance rápidamente a lo largo del litoral del Golfo de México y que interactúe con la extensa circulación de la posible tormenta tropical Pilar, ubicada al sur de las costas de Chiapas. Esta combinación de factores dará lugar a un temporal de lluvias intensas y, en algunos casos, torrenciales en diversas regiones, incluyendo Chiapas, Tabasco, Veracruz, Oaxaca y Puebla, así como en la Península de Yucatán.
En este contexto, el pronóstico para Chiapas, Tabasco, Veracruz y Puebla indica que el lunes 30 de octubre se esperan lluvias intensas con acumulaciones de 150 a 250 milímetros, y se pronostica un escenario similar para el martes 31 de octubre. Para el miércoles 1 de noviembre, se espera que estas regiones continúen experimentando lluvias intensas con puntuales torrenciales y acumulaciones de 150 a 250 milímetros. Finalmente, el jueves 2 de noviembre se anticipan lluvias muy fuertes con acumulaciones de 75 a 150 milímetros en estas entidades.
Cabe destacar que, en el caso de Chiapas, se pronostican temperaturas mínimas de cero a 5 grados centígrados durante la madrugada del viernes, lo que requiere medidas de precaución, especialmente en las áreas montañosas y elevadas del estado.
La Depresión Tropical Diecinueve -E o posible Tormenta Tropical Pilar del Océano Pacífico está siendo monitoreada de cerca, ya que su trayectoria podría afectar a Chiapas. Se advierte que todas las lluvias pronosticadas podrían ir acompañadas de descargas eléctricas, rachas de viento y posible caída de granizo. En los casos de lluvias intensas y torrenciales, existe el riesgo de aumento en los niveles de ríos y arroyos, deslizamientos de tierra e inundaciones.