Sin fecha para reubicar a familias de Tierra Colorada

Elam Náfate

  · domingo 16 de junio de 2019

Tierra Colorada, es uno de los asentamientos irregulares dentro del Parque Cañón del Sumidero y del cual no existe fecha para la recuperación del predio que abarca una extensión de más de 300 hectáreas.

A pesar de que es un tema del cual ha requerido una atención especial, desde hace tres sexenios, de las autoridades estatales y federales no se ha concretado la solución en la cual se encuentran involucradas más de 350 familias.

“Es un tema especial, pues ellos ya estaban ahí desde antes que se hiciera el decreto del Parque. Se han establecidos diversas mesas de atención pero no se ha llegado a su reubicación” destacó Pedro Hernández, director de esa área natural protegida.

Para que exista la reubicación total de las familias de esa área, la cual ha sido impactada, dijo, se requiere de la adquisición de por lo menos 450 hectáreas en otro sitio, y que tenga por lo menos las mismas características de la actividad que ellos realizan, que es la cafeticultura y la siembra de maíz.

Una de las situaciones que se han generado es que las familias siguen creciendo y ello ha obligado a impactar más los terrenos que de cierta manera estaban conservadas, “requieren más tierras y por eso es el diálogo para su reubicación porque ya no disponen de más extensión territorial” sostuvo.

“Se necesita una reubicación en la que no se afecte sus derechos. Como ha habido pláticas con ellos, se mantienen en la misma extensión de terreno que desde el principio tenían como poseedores” refirió el funcionario.



Por la cafeticultura que practican no existe muchos problema puesto que se realizan bajo sombra, las complicaciones se dan, dijo, en la práctica de la siembra de maíz porque han ocupado una considerable extensión que la trabajan de manera tradicional.

En esa costumbre de labrar la tierra, mencionó, utilizan el fuego para limpiar los terrenos y en ocasiones éste se sale de control generando incendios en los alrededores, a los que tiene que llegar los brigadistas, destacó.

Las más de 350 familias por vivir manera irregular en lo que fuera legítima propiedad, han tenido que padecer de falta de inversión en infraestructura, no tienen servicio de agua potable y drenaje, carecen de escuelas dignas.

Una de las canchas de basquetbol que les fue construida antes del decreto no se le dio más el mantenimiento y actualmente luce destruida, las aulas de la escuela multigrado está construida de madera.