La sociedad tiene en sus manos grandes responsabilidad afirma el arzobispo Fabio Martínez Castilla y hace referencia al caminar desde el 2 de abril con el miércoles de ceniza y el inicio de la cuaresma, un caminar permanente para trabajar por la paz y el llamado a partir del 6 de abril a vivir con alegría y vencer las tentaciones; la segunda semana el mundo fue invitado a un cambio de actitud y dar frutos buenos, en la tercera semana se nos ha invitado a replicar lo bueno y en esta semana somos convocados a un cambio permanente de nuestra vida.
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No podemos desaprovechar la oportunidad para ser constructores de buenas costumbres y de un mundo mejor tenemos que lanzarnos hacia adelante a pesar de que algunos nos quieran condenar y apedrear, necesitamos hacer camino y cambiar nuestra vida; tenemos que ser diferentes con nuestros prójimos y aflojar las piedras que hay en el corazón para tener una actitud diferente, no a los resentimientos, rencores, ni actitudes de venganza.
"Hay que hacer un nuevo camino, vamos a echarle ganas y ser misericordiosos a veces los seres humanos tenemos piedritas y tenemos que soltar las piedras aflojar las piedras que a veces tenemos en el corazón, resentimientos, envidias y actitudes de venganzas; los que tengamos piedras grandes en el corazón, bombas o misiles hay que soltarlos para que se vayan suavizando los corazones”.
A 17 años de la muerte de San Juan Pablo II la Iglesia tiene que actuar con más ganas el servicio a los demás, el siguiente será el Domingo de Ramos que es el 10 de abril y tenemos que estar atentos a las mociones de Dios para cambiar nuestro corazón e iniciar una Semana Santa con un cambio de actitud, de perdón, una actitud libre de odio y con una gran disposición de ayudar a quienes nos necesitan sobre todo los enfermos.
Durante las celebraciones eucarísticas del Domingo de Ramos la Iglesia habrá de bendecir palmas y colocará en los templos palmas para conmemorar la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, éstas se colocan después en los hogares, en las puertas, ventanas o altares, un tiempo de vivir en reconciliación con el mundo.
El lunes santo del 11 al 17 de abril vivirá la Iglesia días intensos, la iglesia conmemorará la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén con un llamado permanente a dar frutos útiles, seguir los pasos del bien, de la reconciliación y del amor, el jueves santo 14 de abril se representará el lavatorio de los pies; la mañana del viernes 15 será la representación del viacrucis y al final la lectura de las siete palabras pronunciadas por Jesús desde la cruz y por la tarde se representa la procesión de María al sepulcro.
Para el sábado 16 la Iglesia celebrará la liturgia más extensa en la eucaristía para conmemorar la pasión de Jesús, para el domingo 17 celebrará la vigilia pascual para conmemorar el anuncio de la salvación por Jesús o Domingo de Pascua, el día del triunfo de Jesús conmemoración que invita a la humanidad a la fraternidad.