• Esta especie ha proliferado en los últimos años yha afectado severamente ecosistemas de la entidad

La zona de la Angostura, Chicoasén y Malpaso se hanvisto invadidas por el pez diablo, especie considerada una de lasmayores amenazas para la biodiversidad acuática.

Al respecto Ricardo Hernández, secretario de MedioAmbiente e Historia Natural informó que debido a suscaracterísticas reproductivas y morfológicas este pez tiene pocosdepredadores naturales, y una excepcional capacidad de adaptación,lo que afecta severamente a otros peces.

Aunque recalcó que este problema es aun controlable,es necesario bajar los índices de perturbación, ya que no existeun programa efectivo para el control del pez diablo.

“El río Grijalva tiene ya un grado de afectaciónsobre todo en la zona de Tabasco; debemos ser muy cuidadosos paraque no invada la parte alta, donde hay una serie de presas”,mencionó el funcionario estatal.

Señaló que en parte del Usumacinta aún no setienen registros de invasión, pero es probable que si loshaya.

“Este pez diablo también conocido limpia peceras olimpia vidrios, fue detectado por primera por vez en Chiapasdurante 2003, justo agua abajo de la presa Peñitas”,afirmó.

Una de las zonas con mayor invasión de dicha especiees el de la cuenca Grijalva-Usumacinta y, probablemente se hadispersado hacia la parte alta de la cuenca.

“Tenemos registros obtenidos que estos peces se hanestablecido con éxito en todos los cuerpos de agua de la zonanorte de Chiapas, como los sistemas fluvio-lagunares de la planiciedel Golfo en los municipios de Reforma, Pichucalco, Salto de Agua,Catazajá, Palenque y La Libertad”, mencionó.

Recalcó que el monitoreo es lo único que les haservido para evitar la proliferación de este pez, que destruyepotencialmente otros ecosistemas.