Renuncia de Ayuntamiento quita presión a Amatán

Persiste exigencia de castigo a los responsables de los crímenes, afirma Diego Cadenas

ISAÍ LÓPEZ/ELAM NÁFATE

  · sábado 2 de febrero de 2019

La renuncia del Ayuntamiento de Amatán ayuda a despresurizar la complicada situación política y social de ese municipio indígena; no obstante, la exigencia de las comunidades es el nombramiento de un Consejo Municipal que responda a las necesidades del pueblo, a la par de que se mantiene la demanda de castigo a los responsables de los crímenes ocurridos recientemente en esa demarcación, afirmó Diego Cadenas Gordillo.

El director del Centro de Derechos Humanos “Ku’untik” de San Cristóbal de Las Casas, afirmó que la justicia debe incluir a los funcionarios omisos, quienes tuvieron conocimiento de la situación política y social y no actuaron con medidas preventivas.

En el municipio de Amatán, el 22 de noviembre del 2018 fueron victimados Carlos Mayorga Guerrero y José Armando Jiménez Jiménez, mientras que el 17 de enero fueron asesinados Noé Jiménez Pablo y José Santiago Gómez Álvarez, miembros de la organización social Movimiento Campesinos Regional Independiente (MOCRI-CNPA-MN).

Durante la sesión de Cabildo del pasado jueves, dejaron el cargo quien fungía como presidente municipal, Manuel de Jesús del Carpio Mayorga; la síndico Leticia Candelaria Castro Pérez; los regidores Abraham Ruiz López, Eneida Torres Castellanos, Nicolás Jiménez Gómez, María Eugenia Méndez Méndez, Martín Méndez Mejía y Miguel Ángel Chávez Juárez.

Todos ellos ostentaban el cargo público desde el 1 de octubre del año pasado en que tomaron posesión, luego de ganar postulados por el partido político Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), y luego de su renuncia los pueblos y comunidades de Amatán demandaron castigo a los responsables, tanto intelectuales, como materiales y los omisos.

Agregó que la presencia de las fuerzas de seguridad federales es fundamental en la zona, tras la recomendación y atracción del caso de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, mientras que la peregrinación de este viernes convocada con anticipación a la renuncia del ayuntamiento, es una evidencia de la exigencia de paz y justicia en el lugar.

Diego Cadenas puntualizó que la peregrinación es para demostrar solidaridad con el párroco de Amatán, José Domínguez Domínguez, pero indirectamente ayuda al movimiento civil; “la autoridad debe hacer un seguimiento muy puntual para generar las condiciones de estabilidad social, justicia y paz”, dijo.

El documento de renuncia de los ahora ex servidores públicos establece que derivado de la gravedad de los conflictos sociales de Amatán, es necesario separarse del cargo con el fin de salvaguardar la integridad física de los integrantes del Cabildo y de las demás personas del municipio y abonar a la paz.

Sin embargo, los integrantes del ayuntamiento en el mismo escrito manifestaron su temor a sufrir represalias y a que su integridad física y de sus familiares estén en riesgo; no obstante, ratifican su deseo y disposición al diálogo y abonar a la estabilidad social del municipio.


CONFÍAN EN RETORNO DE DESPLAZADOS

Por otra parte, Cadenas Gordillo afirmó que existe confianza en la actual administración para que la situación de más de 400 indígenas desplazados en Chiapas, se resuelva y encuentre una solución definitiva que genere las condiciones necesarias para que retornen a sus comunidades de origen en busca una vida digna.

Son cuatro grupos de desplazados: ejidos tzeltales Tenango y Cintalapa, ambos del municipio de Ocosingo; Shulvó del municipio de Zinacantán y el ejido Puebla del municipio de Chenalhó.

Comentó que a diferencia de la anterior administración, actualmente la ayuda humanitaria ha sido entregada de forma puntual, sobre todo los alimentos y en cantidad suficiente, aunque reconoció que hay carencias en alimentos cárnicos.

“En el caso de las viviendas hay un retraso en la renta, dijéramos también que hay un pendiente en el tema de la educación de las niñas y niños, pero actualmente están siendo atendidos por alumnos de la Escuela Rural ‘Mactumactzá’, desde hace 14 días”, afirmó.

Agregó que hay un clima de confianza para que el gobierno establezca las condiciones que permitan un retorno digno a las comunidades: “hemos visto señales que nos permiten suponer que sí hay voluntad para hacer las cosas, ha habido dos sesiones en las ordinarias del Consejo para la Atención Integral de Desplazamiento Interno, la cual fuimos invitados como Centro de Derechos humanos y hemos visto que se están cumpliendo los requisitos que la ley señala, han estado los titulares y eso para nosotros es una buena señal”.



Por último informó del constante diálogo con las autoridades de gobierno y autoridades federales, “estamos muy pendientes de la situación y tenemos confianza en que todo va a solucionarse a favor de los indígenas desplazados”.