En el corazón de Chiapas, la temporada decembrina trae consigo no solo frías temperaturas, sino también un manjar que ha marcado la infancia de generaciones: las hojuelas. Este postre, popularmente entregado en festividades, se presenta como una deliciosa opción frita y bañada con miel roja, despertando los sabores más auténticos de la región.
Desde principios de diciembre hasta el mes de febrero, las hojuelas se convierten en protagonistas culinarias, adornando las mesas de posadas y nacimientos del Niño Dios. Su consumo se incrementa durante esta época, convirtiéndose en un símbolo inconfundible de las festividades navideñas en Chiapas.
Al norte de Tuxtla Gutiérrez, en una casa marcada con el número 33 de la colonia Infonavit Chapultepec se encuentra Doña Manuela del Carmen Martínez Ramírez, que por más de 50 años se ha dedicado a la elaboración de hojuelas, esto junto a su familia.
Para ella también es conocido como pañalito de niño, durante estas fechas las hace para el nacimiento del niñito dios, una forma de venerarlo y además para compartir junto a su familia, en unidad y paz, recordando la llegada de Jesús al mundo.
Su casa se ubica en el andador paseo la capilla, edificio 282 manzana 33 de la colonia Infonavit Chapultepec, ahí se reúne con una de sus hijas para elaborar las hojuelas, donde amasan la harina, baten los huevos y ponen el sarten con el aceite hirviendo para posteriormente comenzar la producción de hojuelas.
La receta, transmitida de generación en generación, revela la simplicidad y la exquisitez de este manjar tradicional.
Ingredientes:
- 2 huevos
- 1 cucharadita de azúcar
- 1 pizca de sal
- ½ taza de leche
- 1 taza de harina de trigo cernida
- Cantidad necesaria de aceite vegetal
Paso a Paso:
- En un tazón, mezclar los huevos con el azúcar y la sal.
- Agregar la leche y mezclar bien. Poco a poco, agregar la harina y mezclar hasta formar una masa moldeable.
- Dividir la masa en pequeñas bolitas y dejar reposar durante 30 minutos.
- Estirar la masa hasta que quede delgada.
- Freír en abundante aceite caliente hasta obtener un dorado perfecto.
- Retirar del aceite y dejar escurrir el exceso de grasa.
- Servir las hojuelas bañadas con sirope rojo, resaltando su textura crujiente y sabor inigualable.
Las hojuelas no solo son un deleite para el paladar, sino también un lazo que une a las familias chiapanecas durante las celebraciones. La combinación de ingredientes sencillos y el proceso cuidadoso de preparación hacen de este postre una joya culinaria que perdura a lo largo del tiempo. Antes costaba 3 hojuelas por $10 pesos, ahora son 3 hojuelas por $20 pesos.
En cada bocado, las hojuelas no solo transportan al comensal a su infancia, sino que también representan la rica tradición gastronómica de Chiapas, que continúa deleitando a quienes tienen el privilegio de probarlas. Este diciembre, las hojuelas se erigen como embajadoras de la tradición chiapaneca, conquistando corazones con su sabor inconfundible.
Con Informacion de Thiaré García | El Heraldo de Chiapas
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