La noche del pasado lunes más de mil personas invadieron las calles de Tuxtla Gutiérrez, como parte de la tercera edición del desfile de “Catrinas y Catrines”, el cual tiene como objetivo conservar y preservar una de las tradiciones más importantes de nuestro país, el Día de Muertos.
Fernanda Reyes, organizadora del evento dijo que tras casi tres años de pandemia, era necesario reactivar esta tradición y que las personas salieran a las calles, para recordar y a su vez rendir un homenaje a nuestros seres queridos que se adelantaron en el camino.
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“Para conservar nuestras tradiciones mexicanas y toda la cultura que tenemos este Día de Muertos… Bueno invitarlos a todos a que vean este tipo de recorridos, a que se unan a este tipo de eventos, si normalmente lo celebran o no lo celebran, no se preocupen disfruten mucho de esta convivencia porque la verdad es que nos divertimos mucho, tratamos de pasar un momento muy alegre”.
Con el rostro pintado de calaveras y algunos portando el traje típico de parachico, chiapaneca y mariachi, bailaron por la principal avenida de la capital chiapaneca, al son de la tambora y la trompeta, dando vida a esta ciudad que hoy se mostró más viva que nunca.
Belén Caballero, participante de este evento, señaló que es importante disfrutar el Día de Muertos porque además de toda la historia ancestral que conlleva, también es un día de fiesta para recordar a nuestros seres queridos que en estas fechas de acuerdo a las creencias, es cuando vienen a visitarnos.
“Revivir las tradiciones cada año es importante, ya que al participar en este tipo de eventos seguimos rescatando nuestras tradiciones como mexicanos “.
Por su parte, William Balam, otro de los jóvenes que también participó en este magno evento, apuntó “que la importancia es seguir disfrutando de esta cultura, de este evento del Día de Muertos, darle más prosperidad de seguir esta festividad que se celebra cada año… seguir inculcando que no se pierdan nuestros valores, nuestra cultura, nuestros orígenes.”
Durante el recorrido diversos automovilistas también se sumaron al contingente, así como los carros alegóricos que le dieron mayor color al recorrido, pues la ciudadanía salió a las calles para ser testigo de esta gran celebración, la cual inició en el lado poniente de la ciudad a la altura de la llamada “Cabeza Maya” y culminó en uno de los barrios más tradicionales del centro, el barrio de San Roque.
