Tuxtla Gutiérrez.- El llamado de la Pastoral Social de la Provincia Eclesiástica de Chiapas, es que comience en Amatán una nueva historia marcada por la construcción de la paz y desarrollo, nos conduzcamos en fraternidad para encontrar la tranquilidad que el pueblo anhela y necesita, afirmó el presbítero Marcelo Pérez Pérez.
Los lamentables hechos de enero nos tiene que llevar a una profunda reflexión y compromiso para que nunca más se vuelva a repetir, que no haya más muertos, pero sobre todo, que comience un nuevo amanecer para este pueblo rezagado en la pobreza y esclavizado por la corrupción y ambición.
Tengo la esperanza de que en esta etapa sea un parte aguas en su historia, un antes marcada por la pobreza, violencia, corrupción y ambición, un después marcada por la construcción de un gobierno plural e incluyente en donde junto con el pueblo se haga realidad el desarrollo social, económica, cultural, teniendo como bandera en alta la paz.
“Queremos paz fundamentada en la verdad, la justicia, libertad y respeto a los derechos humanos; pidamos perdón por haber perdido la paz, nos hemos olvidado de la verdad, de la justicia, por eso hay mucha pobreza, ha quedado en rezago, por las injusticias, porque el techo financiero que le corresponde y no se distribuye equitativamente en las comunidades, es posible que haya quedado en manos de unos pocos”.