En el corazón de la Selva Lacandona habita el mono aullador (Alouatta pigra), un primate arbóreo y diurno que forma unidades sociales y reproductivas conocidas como tropas. Estas tropas están compuestas por hembras y machos adultos, juveniles e infantes, lo que refleja la compleja estructura social de esta especie.
El mono aullador está considerado en peligro de extinción según la NOM-059-SEMARNAT-2010, lo que subraya la importancia de conservar su hábitat. La protección de esta especie no solo es crucial para su supervivencia, sino también para la preservación de la biodiversidad en la Selva Lacandona.
Lee más: Cocodrilo y su hábitat en el Cañón del Sumidero: CONANP
La Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn) ha resaltado la necesidad de implementar y fortalecer programas de educación ambiental que conciencien sobre la importancia de conservar esta especie y su entorno. Estos programas buscan involucrar a las comunidades locales y promover prácticas sostenibles que ayuden a reducir las amenazas a su hábitat.
El esfuerzo por proteger al mono aullador es un reflejo de un compromiso más amplio con la conservación de la Selva Lacandona, uno de los ecosistemas más ricos y diversos de México. La colaboración entre autoridades, organizaciones no gubernamentales y la comunidad es esencial para asegurar que futuras generaciones puedan seguir disfrutando de la riqueza natural que esta región ofrece.
Cabe mencionar que la Selva Lacandona alberga una de los ecosistemas con mayor biodiversidad en el planeta, la Reserva de la Biósfera Montes Azules. Entre los servicios ambientales que presta se encuentran la captura de miles de toneladas de carbono, la regulación del clima, la producción de 30% del agua del país y la conservación de suelos. Esta selva es el hogar del 50% de las mariposas y del 50% de los mamíferos registrados en México.
¡Recibe las noticias a tu WhatsApp! Regístranos y manda la palabra ALTA ⬇️