En las condiciones en que hoy se llevan los éxodos en el orbe, son totalmente injustas y deshumanizadas, donde un alto porcentaje de migrantes pierden la vida, México desgraciadamente no es la excepción, ojala que los gobiernos apoyen para abatir las causas que provocan las migraciones, sostuvo José Manuel Blanco Urbina, presidente de la Comisión de Derechos Humanos no gubernamental de Chiapas.
En el marco del Día Internacional del Migrante, este sábado 18 de diciembre, sostuvo que el Estado Mexicano debe investigar las causas y deslindar las responsabilidades por las que pierden la vida michos migrantes en su transito por México, Chiapas se ha convertido en una ruta peligrosa, en ese sentido, debe esclarecerse hasta las últimas consecuencias el accidente ocurrido el 9 de diciembre pasado en Chiapa de Corzo en el que perdieron la vida 56 migrantes y otros más resultaron lesionados.
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De acuerdo con el abogado, existen elementos fundamentales para desbaratar la red de traficantes de humanos desde Centroamérica hasta los Estados Unidos, presumiblemente tienen participación servidores públicos de alto nivel desde la llegada de migrantes a la frontera sur, en su tránsito por Chiapas, como en el desplazamiento hacia la frontera norte de México.
Blanco Urbina sostiene que cada vez resulta más caro y más peligroso para los migrantes las diversas rutas, por lo que la atención del fenómeno tiene que ser integral y multilateral, con el concurso de los gobiernos de las naciones expulsoras, de las que son transitadas y las de origen y beneficiarias de la migración, que necesariamente tiene que ver con el combate de la pobreza y la inseguridad en las naciones de origen.
En este día propuesto por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para conmemorar el Día Internacional del Migrante, debe ser de mucha reflexión pero sobre todo de compromisos, no de ocurrencias, tampoco solo discursos, las situaciones desgarradoras a las que se enfrentan los migrantes tienen que ser atendidas no administradas con programas sólidos de inversión que verdaderamente funcionen y cambien la vida de los migrantes.
Aun se siguen cuestionando los programas del gobierno de Vicente Fox Quesada llamado Plan Puebla Panamá, o el de Felipe Calderón Hinojosa, aunque con otro nombre, que pretendían desalentar la migración, o el actual sembrando vida, lo que se necesita es cambiar el hambre, la injusticia, el abandono y la exclusión por mejores condiciones de vida, pero que quienes trafican con las necesidades de los humanos respondan por sus actos ante la justicia.