Tuxtla Gutiérrez.- El Observatorio de Participación Política de las Mujeres debidamente integrado el pasado 22 de abril, deberá plantear la atención y resolver la violencia política de la que está siendo víctima la síndica electa de San Juan Cancuc, Martha López Sántiz, así como la presidenta municipal de Mitontic, Manuel Martínez Icó, opinó Claudia Trujillo Rincón, coordinadora estatal del partido político Movimiento Ciudadano.
En San Juan Cancuc el presidente municipal del Partido Revolucionario Institucional, José López López, le ha negado a la síndica asumir el cargo constitucional desde el 1 de octubre del año pasado, para el que fue electa en las elecciones del primer domingo de julio.
Mientras tanto, en el municipio indígena de Mitontic, la alcaldesa Manuel Martínez Inó, electa por el Partido Verde Ecologista de México, no ejerce el poder, sino el esposo, Erasto Ordóñez, de acuerdo con los sistemas normativos internos o usos y costumbres.
El primer domingo de julio del año pasado fueron electas por voto de los chiapanecos 33 presidentas municipales, 89 síndicas, 243 regidoras por el principio de mayoría relativa y 263 por el principio de representación proporcional, así como 26 diputadas, todas están todas en su poder, pero hay que hacer un monitoreo para saber “quienes fungen y quienes fingen”.
Trujillo Rincón enfatizó que en este monitoreo conoceremos quienes realmente ejercen el poder y quienes han sido desplazadas por los esposos, puede presentarse el caso de que los esposos estén acudiendo a la Auditoría Superior del Estado, presentándose como los alcaldes.
Tras el relevo en la presidencia y secretaria técnica del Observatorio de Participación Política de las Mujeres, que recae en la secretaría de la Igualdad de Género y el Tribunal Electoral del Estado, es necesario y urgente hacer frente a la violencia política de género.
El ejercicio de embonar políticamente es complejo, la participación de las mujeres sería como un motivo de la violencia, pero no la razón, siempre en el ejercicio público y político hay roces y diferencias, pero hay que resolverlo en su justa dimensión, dijo.