Habitantes de las colonias aledañas al Cañón del Sumidero, exigieron se aclaren las acusaciones lanzadas en días pasados en las que se involucra a la organización Antorcha Campesina de someter y manipular a las familias de la zona; además de tomar predios de manera irregular.
En un comunicado de la organización en Chiapas, aseguraron que, en las colonias populares, como: Julio César Ruiz Ferro, Pedregal San Ángel, El Refugio, Plan Chiapas e Independencia 2000, no existe ningún grupo infiltrado que obligue a la gente hacer actividades ilícitas y tampoco que confabulen con el edil de Chiapa de Corzo, Jorge Molina Gómez.
Por tanto, piden al gobernador, Rutilio Escandón y a las autoridades pertinentes, poner atención a este tipo de acciones; que sólo generan violencia y desestabilizan la paz social entre los mismos colonos, que durante varios años han trabajado organizadamente en favor del desarrollo.
Este panorama, advierte, en nada beneficia a la población que, no solicita lo que por derecho corresponde, como obras públicas, para tener el control de las colonias y no rendir cuenta de nada.
Señalaron que desde la llegada de Antorcha a la colonia El Refugio y a la Ruiz Ferro hace 26 y 23 años, respectivamente; la situación de las familias ha mejorado en el ámbito educativo, social y cultural, toda vez que, se han construido obras de alto impacto, como: casa de salud y cultura, escuelas, pavimentaciones, canchas techadas, electrificación, apoyos para las viviendas y programas sociales.
Los resultados fueron posibles por la lucha solidaria de las familias con el respaldo del Movimiento Antorchista que dirige Rocío Huerta Ibarra, en Chiapa de Corzo, a quien reconocen su esfuerzo y voluntad inquebrantable, por llevar mejores condiciones de vida a lugares marginados.
Finalmente, los colonos enfatizaron, que su labor no amedrenta ni viola los derechos de ningún individuo, al contrario, siempre se han mantenido dentro de la ley, siendo ellos los precursores al respeto del derecho ajeno y del fomento a la fraternidad entre las masas.
Por ello, responsabilizan a Gaspar “N”, de lo que le pueda ocurrir a Huerta Ibarra, por las injurias que levantó en su agravio, mismas que incitan a la violencia en su contra, poniendo su seguridad en estado de vulnerabilidad.