A pesar de que Chiapas tiene 10 meses consecutivos de prevalecer en el semáforo epidemiológico en color verde en el Covid-19, de parte del gobierno federal no existe una estrategia que permita incentivar una mejoría económica para la población.
El secretario de Procentro, Aníbal Enrique Núñez, afirmó que la situación económica que predomina en la frontera sur del país, es preocupante, ya que prevalecen los negocios con las cortinas cerradas, jefes de familia sin trabajo, profesionistas sin oportunidad laboral, falta de capital circulante y cero actividades de inversión privada.
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Lamentó que el gobierno federal y estatal estén apáticos ante la necesidad de una reactivación económica para la zona, a pesar de que se vislumbra un cese al incremento de contagios del Covid-19, por lo que deja entrever que este gobierno de la llamada cuarta transformación es de ocurrencia y no de planes.
Hizo un llamado al presidente de la república y al gobernador del estado, para que implementen un programa de ayuda económica para las clases medias y bajas, a través de instituciones financieras del gobierno que les permita obtener un crédito a una tasa baja de interés.
Por su parte, el presidente del Frente Cívico Popular del Soconusco, Pedro Pablo Scott Ramos, expuso que quienes quieren salir adelante ante este estancamiento económico, y al no tener opciones dentro de algún programa de gobierno, han caído en manos de prestamistas colombianos que operan con impunidad en Tapachula, y que proponen préstamos con intereses altos y de rezagarse en el pago, han sido amenazados y hasta golpeados.
Asimismo, se refirió sobre la inseguridad social que se vive a partir de la llegada de miles de personas extranjeras en su calidad de migrantes, lo que tiene sin control a esta zona, y origina que cualquier interés de inversión de capitales disminuya, pues este desorden, viene asociado con la inseguridad pública.
Scott Ramos puntualizó que este gobierno debió ser mejor que los anteriores por las expectativas que se tuvieron, pero lamentablemente ha resultado más de lo mismo, en el que los más perjudicados continúan siendo los municipios de la frontera sur de Chiapas.