El estado de Chiapas, de un universo de entre 27 mil y 28 mil concesiones del transporte público, el 80 por ciento requiere ser sustituido, debido a que ya caducó los años de servicio, de acuerdo con la Ley de Movilidad y Transporte, del 201 y su Reglamento del 2022, que establece 5 años de vida útil para las combis y 7 para los taxis, de ese universo, unas 2 mil combis circulan en Tuxtla Gutiérrez y al menos la mitad deben ser sacadas de circulación por no reunir los requisitos, al igual que la mitad de los aproximadamente 7 mil a 10 mil taxis.
De acuerdo con el ambientalista y desarrollador urbano Carlos León Chanona, Chiapas adolece de calidad del servicio en el transporte público, en gran parte porque las unidades ya fenecieron su vida útil, algunas son catalogadas como chatarras, el hecho de que se les vaya los frenos es una evidencia de la falta de mantenimiento o de lo avejentado de las unidades, y la Secretaría de Movilidad y Transporte, debería aplicar la ley.
Lo que urge es la modernización del transporte público en el estado y en especial, en Tuxtla Gutiérrez, hay que eliminar las unidades que ya no cumplen con los requisitos para la circulación, el gobierno del estado y el municipio deberían invertir en el transporte porque ese es el futuro de todas las ciudades, una red articulada, es muy alto el número de carros circulando, en el centro de la capital se genera un caos vial.
León Chanona relaciona el mal estado de las unidades del transporte público con las vialidades que no reúnen a su juicio, las condiciones técnicas, ambientales, económicas, sociales, como el proyecto del Circuito Interior Chiapas de Corazón, que de construirse, el transporte público no lo utilizaría por tratarse de una vialidad rápida, las combis y los taxis circularían por abajo, en las vías lentas buscando el pasaje.
Sostiene que primero no se debe elaborar un proyecto pensando en el número total de autos, se analizan con base en el horario pico, a la hora en que hay más vehículo, y en estos cruceros donde se plantea el Circuito Interior para enlazar a los dos libramientos norte y sur, es de 8 a 9 de la mañana y de 5 a 6 de la tarde, y solo pasan 2 mil vehículos en esas horas.
Puntualizó que los taxis y las combis van por abajo, el mismo transporte de carga posiblemente no subiría, los beneficiarios son mínimos, un 11 por ciento de la población total de Tuxtla Gutiérrez de 700 mil habitantes, el problema es complejo pero hay que abordarlo y hacerlo con la mayor responsabilidad.
Por su parte, Karla Escobar, del Colectivo Menos Puentes Más Ciudad, dijo que utiliza el transporte público desde los once años de edad y lleva 18 años utilizándolo, muchos carros son ya obsoletos, al igual que en la capital en otras ciudades pasa lo mismo, las unidades circulan a altas velocidades, frecuentemente están los vehículos en el taller.
Comentó que los accidentes son causados generalmente por el mal estado de las unidades y la urgencia de la sociedad es la modernidad, se trata de un transporte de deficiente, indigno alto riesgo, inseguro, incómodo y peligroso para los usuarios.
Considera que no es posible poner en riesgo la vida de quienes usan el transporte público y antes de plantear una infraestructura de 2 mil 300 millones de pesos como el proyecto del Circuito Interior, habría que pensar urgentemente en la modernización del transporte, inclusive pensar en el transporte eléctrico, la infraestructura sería solamente para el 11 por ciento de la población de la capital, insistió.
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