Venustiano Carranza.- El arte del textil en el pueblo tsotsil de Venustiano Carranza es una manifestación única que se diferencia del resto del estado de Chiapas. En esta comunidad, se confecciona tela delgada y fresca utilizando hilos uno a uno, lo que confiere a las prendas una sensación de frescura inigualable. Camisas, pantalones, blusas, vestidos y batas, confeccionadas con este telar de cintura, pueden ser usadas en cualquier ocasión. Sin embargo, la confección de una sola prenda es mucho más que la creación de ropa: representa una conexión profunda entre el pueblo y la madre tierra y refleja su cosmovisión.

Martha Gómez Martínez, quien pertenece a la sexta generación de su familia dedicada a la confección de telar de cintura, explica que es una labor que requiere delicadeza y paciencia. La elección de hilos de seda es esencial y la confección de una sola bata puede llevar hasta 25 días de trabajo minucioso.

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Si se considera el tiempo y esfuerzo invertidos, el precio de mercado de una de estas prendas debería ser al menos de 4 mil pesos. Sin embargo, lamentablemente, este valor no refleja adecuadamente los días de trabajo dedicados, sino principalmente el costo de los materiales, que ronda los 300 pesos por hilo de seda.

El proceso de creación implica varias etapas, desde urdir el hilo en el bastidor hasta utilizar herramientas de madera tradicionales. Martha, al igual que su familia, ha dedicado su vida a esta tradición textil y se ha levantado a bordar desde las siete de la mañana durante tres horas, antes de realizar sus tareas diarias en casa. Luego, continúa bordando a las 3 de la tarde después de comer. A pesar del desafío que representa el telar de cintura, considera que es poco probable que desaparezca en Venustiano Carranza debido al alto valor cultural y la tradición que representa.

La cosmovisión de la comunidad se refleja en estas artesanías, que son utilizadas por los carrerantes, habitantes locales, como prendas de su vida cotidiana. Aunque la creación de estas prendas es complicada y laboriosa, solo se gana un 40 por ciento de su valor en el mercado. Martha hace hincapié en la importancia de valorar adecuadamente estas piezas únicas y auténticas, en lugar de regatear sus precios. La tradición del telar de cintura en Venustiano Carranza es una parte esencial de la identidad cultural y artística de esta comunidad tsotsil.