Solo basta dar unos pasos después de México para entrar a un terreno hostil en Guatemala, a oscuras debido al corte de suministro eléctrico masivo que ha realizado Energuate, la empresa encargada de proveer de luz a todo este país centroamericano.
En la garita internacional Talismán - El Carmen, la “cueva de lobo” se ha convertido en un problema mayúsculo que el gobierno guatemalteco no solventa desde el pasado 7 de febrero, cuando debido a los excesivos cobros de tarifas eléctricas, cientos de pobladores de distintas comunidades y ciudades decidieron no pagar más por estas irregularidades.
Y es que los recibos alcanzaron cantidades de adeudo exorbitantes en viviendas donde apenas cuentan con refrigerador. Cobros que llegaron a los mil 800 quetzales bimestrales, unos 4 mil 740 pesos mexicanos, los cuales las familias aseguran no fueron consumidos y tampoco son pagables ahora, en medio de una pandemia que ha lacerado a muchos sectores productivos.
Va para casi dos meses que el servicio de luz no se restaura en esta parte del departamento de San Marcos, lo que ha dejado serias secuelas a la economía de las familias y comerciantes guatemaltecos.
El problema ha obligado a militares y policías nacionales a redoblar vigilancia entre la oscuridad de la carretera que conecta a la frontera México - Guatemala con Malacatán y otras localidades del país vecino.
Muchos afectados a oscuras
Desde entonces la situación ha tenido momentos de tensión. Apenas el pasado 27 de febrero, 20 días después de la interrupción del servicio de luz, cientos de pobladores se apostaron en las oficinas de Energuate en Malacatán, San Marcos, para exigir que se restableciera el suministro de energía o lo haría por la fuerza.
En esa ocasión, uno de los inconformes logró ingresar hasta la planta y en su intento por activar el flujo eléctrico recibió una fuerte descarga que lo llevó a estar muchos días hospitalizado. Este miércoles último fue sepultado al no soportar las quemaduras que presentó.
La situación no cambió. Hasta ahora cientos de hogares ven llegar la noche con pena, pues no hay ni un solo rastro de luz puertas adentro, mientras que en las calles y carreteras ilumina apenas aquellas empresas que han alquilado plantas generadoras de luz por costos altos, las cuales trabajan a base de gasolina.
Según la municipalidad de Malacatán, han sido afectadas por esta situación familias de las comunidades 15 de Enero, 5 de Mayo, El Florido, Santa Ana, San Agustín, El Carmen, Laureles, Las Brisas,
La Curva, Colonia Nueva Esperanza, Sonora, Brasilia y Las Margaritas.
Oficinas de gobierno afectadas
El apagón ha sido generalizado. La municipalidad de Malacatán trabaja con una planta de luz como en muchos otros comercios grandes y oficinas de gobierno federal.
La situación se replica en el edificio de Migración Guatemala, que tiene las 24 horas del día activa una planta de luz para poder tener computadoras y lámparas encendidas, ante al arribo de grupos de connacionales o extranjeros que llegan a este sector a realizar trámites de orden legal.
Lo mismo ocurre en las oficinas centrales de Aduanas de Guatemala, donde con plantas tienen que trabajar en esta enorme garita que da ingreso a territorio chapín.
Algunos comercios con venta de productos en general también se han hecho de estas plantas en renta o compradas para poder enfriar sus productos en refrigeradores.
“Llevamos así más de un mes, pagando por luz extra pero el gobierno no resuelve esta situación que nos está ahorcando”, apuntó Carlos Barrios, comerciante de El Carmen.
Energuate es un monopolio en el sector industrial que depende de la obtención de energía vía México. No es la primera ocasión que en San Marcos ocurre esta situación, pues en años anteriores han llegado a estar en las mismas complicaciones.