La contingencia sanitaria por el Covid-19, ha tomado desprevenidas a familias que repentinamente pierden a un ser querido sin que este haya efectuado su testamento, sobreviniéndoles incertidumbres de tipo legal por la sucesión de los bienes del difunto.
Sobre el tema, el notario público Édgar de León Gallegos, señala que con la pandemia de un momento a otro puede presentarse la muerte, pero al no preocuparse por otorgar los bienes mediante una sucesión testamentaria por lo que la familia tras el duelo, tendrán dificultades legales al no contar con este recurso.
Indicó que al presentarse un caso de Covid- 19 dentro del núcleo familiar, es normal que los integrantes de esta familia, estén más preocupados por comprar medicamentos y los insumos que necesita el paciente, por lo que antes de que haya alguna desagradable situación, es mejor dejar en orden legal, la decisión que se dejará sobre los bienes a los familiares.
Dijo que por la pandemia en la Notaría Pública 141 que él encabeza el testamento tiene un costo de mil pesos y lo que se busca es incentivar a las familias a no heredar problemas a sus seres queridos, ya que al morir sin dejar en orden la herencia, estos tendrían que iniciar un juicio testamentario, que lleva mucho tiempo y cuesta casi 40 mil pesos.
Hay que tomar en cuenta que el enfermo de Covid-19 al ser ingresado a algún hospital, muchas veces no tendrá tiempo de despedirse de sus familiares, solamente en algunos casos, los pacientes infectados han dado el último a adiós a sus seres queridos a través de video llamadas u otros medios digitales.
"No sabemos cuándo vamos a morir y por lo tanto debemos de manera anticipada dejar en orden las cosas, ya que existen muchos problemas familiares debido que los padres no dejaron designado a los herederos de sus posesiones, lo que genera conflictos e incluso hasta muertes" sostuvo.