Prestadores de servicios turísticos solicitan al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) la reapertura de la zona arqueológica de Toniná en el municipio de Ocosingo, cerrada desde el 23 de marzo del 2020, consideran que hay condiciones para la recepción de visitantes y con ello reactivar la actividad económica de la zona afectada por la pandemia del Covid 19.
Solicitan al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, su intervención ante el daño económico que sufren guías turísticos, agencias de viajes, transportistas, cabañas, artesanos, renta de caballos y comercios, toda vez que han realizado peticiones al INAH pero no han encontrado respuestas satisfactorias.
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Esta petición es respaldada por prestadores de servicios turísticos de la Selva Lacandona, entre ellas de la empresa Aventuras Chankin, propiedad de Daniel Chankin, para estar en condiciones de aumentar la afluencia de visitantes a ese corredor turístico que conforman la zona Arqueológica de Toniná en Ocosingo, Zona Arqueológica Bonampak, Centro Ecoturístico Escudo Jaguar, Las Guacamayas, Las Nubes, Campamento Río Lacanjá, Sistema Lagunario Nahá, Cascadas Moctuniha.
La Zona Arqueológica Toniná, la Casa de Piedra, en el municipio de Ocosingo pertenece al periodo clásico de la cultura maya, las dimensiones del sitio son de 75 metros de altura, contiene majestuosos templos, escalinatas, su periodo de auge corresponde a los siglos VII al IX, su estructura piramidal es la más grande del país.
Toniná se ubica a tan solo 10 kilómetros de la cabecera municipal, es posible llegar en transporte público y se asienta sobre un relieve articular natural boscoso, de donde es posible tener una vista panorámica sobre el valle de la zona arqueológica y sus alrededores de Ocosingo.