En un acto de profundo amor y solidaridad, la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción de Venustiano Carranza ha enviado una carta a las comunidades de Chicomuselo y Comalapa, en la cual expresan su dolor compartido ante la creciente violencia que azota a estas regiones.
Dirigida a los feligreses de las Parroquias San Pablo Chicomuselo y Santo Niño de Atocha Comalapa, la misiva subraya que el sufrimiento de estos pueblos es compartido por toda la familia diocesana, recordando que todos forman parte de un solo cuerpo, el cuerpo de Cristo, el cual vuelve a ser crucificado en la carne de tantas víctimas inocentes de la violencia.
La carta denuncia la devastación causada por el "dragón de las siete cabezas", una metáfora que emplea para describir las fuerzas del crimen organizado y los malos gobiernos que han saqueado y despojado a la población durante años, causando terror, inseguridad, secuestros, desplazamientos forzados y muertes. "Pareciera que esta pesadilla va de mal en peor y no se le ve su fin", se lamentan.
Inspirados por el ejemplo de Jesús, quien no evadió ni cerró los ojos ante el sufrimiento de su pueblo, la Parroquia hace un llamado a la comunidad cristiana a no claudicar ni ser indiferentes ante el dolor ajeno. En lugar de ello, invitan a mantener la fe en Dios y en el Espíritu Santo, pidiendo al "Dios de la vida" que mire la aflicción de su pueblo y escuche sus gritos desesperados.
También exhorta a las comunidades, a la iglesia y a la sociedad en general, tanto a nivel local como internacional, a unirse para exigir que el gobierno asuma su responsabilidad y brinde seguridad a las poblaciones afectadas por la violencia.
Finalmente, la Parroquia Nuestra Señora de la Asunción concluye su mensaje con una oración y un abrazo lleno del amor de Dios, reafirmando su esperanza en un futuro donde la justicia, la libertad, el amor y la paz puedan prevalecer en estas tierras tan golpeadas por el mal.