El Pueblo Creyente de la Parroquia de San Antonio de Padua de Simojovel de Allende, manifiesta su preocupación por todos los hechos de violencia, amenazas, injusticias, inseguridad y muertes que ocurren en los municipios de Pantelhó, Chilón, Frontera Comalapa, San Cristóbal de Las Casas, Tuxtla Gutiérrez entre otros, donde el crimen organizado y la lucha de poderes ha llenado de miedo, tristeza y desesperación a las personas que en ellas habitan, y de igual manera han hostigado, criminalizado y atentado contra la vida de las personas defensoras de derechos humanos.
En un comunicado de prensa, manifiestan esto porque en el Pueblo de Simojovel van crecientes casos de narcotráfico, prostitución, venta de alcohol, asesinatos, robos en tiendas y casa habitación, aumento de cantinas, tráfico de armas, trata de personas, etc., por lo que denuncian estos actos que no traen la paz y tranquilidad en los pueblos.
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Como Pueblo Creyente, agregan en el texto, hemos estado denunciando todo lo que genera la muerte porque creemos que la “vida es un don, un regalo de Dios y demasiado breve para consumirla en la tristeza”. También sabemos que “La vida humana es sagrada desde sus comienzos, porque es fruto de la acción creadora de Dios”.
Nos pronunciamos ante estos hechos porque ha cobrado la vida de muchas personas inocentes en diferentes pueblos, una de ellas es la de nuestro hermano catequista Simón Pedro "N" de la Parroquia de Pantelhó asesinado a plena luz del día en una de las calles de nuestro pueblo de Simojovel, por ello, “Todos los Pueblos de la tierra, todos los hombres y mujeres de buena voluntad, tenemos que alzar la voz en defensa de éstos dos preciosos dones: la paz y la naturaleza”.
A la vez, indican, nos solidarizamos por la labor de la Pastoral Social de nuestra Diócesis de San Cristóbal de Las Casas encabezada por nuestro párroco Marcelo Pérez Pérez, que ha venido trabajando con diferentes pueblos tsotsiles, tseltales, zoques, mestizos y de otros pueblos; acompañando procesos de defensa de tierra y Territorio, mediando conflictos y acompañando a comunidades desplazadas, a personas defensoras que han sido criminalizadas por su trabajo de derechos humanos, interviniendo en los pueblos donde hay violencia y conflictos construyendo paz.
Desmentimos las acusaciones falsas que están haciendo al párroco de Simojovel por el conflicto en Pantelhó, de ser fundador del grupo autodefensa “Los Machetes”, de haber dado orden de atacar a la población el 26 de julio, de la detención de personas el 26 de julio, todo esto y más acusaciones, nosotros como pueblo Creyente de esta Parroquia desmentimos totalmente, precisan.
"El Padre Marcelo Pérez Pérez, como nuestro guía y pastor, nos ha enseñado a luchar por la justicia y libertad pero siempre fundamentada en la palabra de Dios y lo que dice la Iglesia, siempre nos ha enseñado a luchar por medios pacíficos, nunca nos ha invitado a la confrontación, y el día 26 de julio estuvo con nosotros servidores y servidoras en Simojovel".
"Nos preocupa las amenazas, hostigamientos, criminalización, deslegitimación y todas estas acusaciones en contra de su persona, porque pone en un alto riesgo su vida, tenemos información de que el crimen organizado que estuvo operando en Pantelhó tienen planeada su muerte. Al igual que él nos preocupa la vida e integridad de nuestro vicario el padre José Elías Hernández, quien acompaña la labor profética de nuestra parroquia", puntualizan.
Agradecen al Obispo de San Cristóbal de Las Casas, Rodrigo Aguilar Martínez, y a todas y todos los agentes de pastoral de nuestra Diócesis que han respaldado firmemente el trabajo de nuestro párroco Marcelo Pérez, a las organizaciones nacionales e internacionales que han acompañado de manera fraternal el caminar de nuestra parroquia.
Ante todo esto, como pueblo creyente: "exigimos a las autoridades del Estado Mexicano poner mayor atención en los casos de violencia que se viven en estos municipios y garantizar la seguridad de los pueblos. Recordamos que el Padre Marcelo Pérez Pérez e integrantes del Consejo Parroquial cuentan con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos".
Por eso, solicitamos la intervención del estado para frenar estos actos de violencia que destruyen la paz y tranquilidad de la sociedad, para que luego no lamentemos más muertes y despojos de tierra y desplazamientos forzados, para que la paz sea posible en nuestros pueblos y hagamos posible la hermandad.