El obispo de Tapachula, Jaime Calderón Calderón reiteró su postura de elegir con libertad para exigir con responsabilidad, al tiempo de dejar en claro que los ministros de culto de las iglesias no deben ni pretenden hacer propaganda o proselitismo a favor o en contra de cualquier candidato, agrupación o partido político.

El obispo de la Diócesis de Tapachula agregó que están conscientes de que su doctrina social les enseña que la fe en Jesucristo puede dar lugar a compromisos políticos diversos y en ese sentido indicó que todos están llamados a formar la conciencia y a proponer y defender con libertad y creatividad los valores esenciales que configuran el bien común, sin los cuales, hasta la misma democracia puede estar en riesgo.

Asimismo, en su mensaje dominical Monseñor Calderón Calderón se refirió a los efectos que se han experimentados en el cambio climático y que por el desarrollo del mismo continuarán conociendo y afectando de manera dramática si como sociedad y personas no nos comprometemos en lograr un cambio significativo.

Agrega que el Papa Francisco en su Encíclica “Laudato si” ofrece una profunda reflexión que conduce a entender que no puede resolverse con respuestas cortas e individualistas, sino que propone una “ecología integral” y estar conscientes de que el problema ecológico está fuertemente relacionado con otros problemas actuales y que cuando se habla de medio ambiente, se indica particularmente una relación, que es la que existe entre la naturaleza y la sociedad que la habita.

Por ello, dijo que no se puede entender a la naturaleza como algo separado de nosotros o como un mero marco de nuestra vida, dijo que la sociedad está incluida en ella, y todos somos parte de ella y estamos interpenetrados.

Llamó a la reflexión de las razones por las cuales un lugar se contamina, exigir un análisis del funcionamiento de la sociedad, de su economía, de su comportamiento, de sus maneras de entender la realidad y que ante esos cambios no es posible encontrar una respuesta específica e independiente para cada parte del problema.

Expuso que es necesario buscar soluciones integrales que consideren las interacciones de los sistemas naturales entre sí y con los sistemas sociales remarcó que no hay dos crisis separadas, una ambiental y otra social, sino una sola y compleja crisis socio-ambiental.

Concluyó al mencionar que las líneas para la solución de esta problemática compleja requieren una aproximación integral para combatir la pobreza, para devolver la dignidad a los excluidos y simultáneamente para cuidar la naturaleza.