Jiquipilas.- Un total de 50 elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) arribaron a la cabecera municipal de Jiquipilas, en donde días atrás se registrara un enfrentamiento entre fuerzas federales y hombres armados.
El convoy de militares se colocó en la entrada de la ciudad, en un punto estratégico, donde pernoctarán y aplicarán operativos con recorridos constantes.
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En la primeras horas de este martes fue notorio el recorrido por parte de agentes de la Guardia Nacional entre el tramo de Cintalapa y Jiquipilas, en la carretera Panamericana, además de mantener presencia en la vía de cuota que va hacia Arriaga y Ocozocoautla.
El Heraldo de Chiapas pudo constatar que no hay un cerco militar como tal en esta ciudad, sin embargo si es notoria su estadía en el municipio, además de que existe un retén en el tramo de la vía panamericana, en donde los elementos de seguridad están llevando a cabo revisiones a las unidades que pasan por dicho punto.
Luego de que la misma SEDENA confirmara que se movilizarían efectivos de su corporación por los municipios de Jiquipilas, Cintalapa y Arriaga, ya ha comenzado a verse la presencia de los uniformados en esta región.
Jiquipilas convertido en Pueblo Fantasma
Un 90 por ciento de los comercios en Jiquipilas se mantienen cerrados, además de que los que abren lo hacen en horarios menores a lo habitual, mientras que las calles lucen desérticas en gran parte del día. Así es la vida en la ciudad tras lo acontecido.
Este medio de comunicación realizó un recorrido por las principales calles de esta ciudad, encontrándose con calles desoladas, personas que apenas salen a comprar y se regresan a sus casas, viviendas cerradas la mayor parte del día, además de que poca actividad económica se ve reflejada.
La presidencia municipal permanece cerrada, sólo con elementos de la policía municipal que están en la puerta y con algunos recorridos cortos que realizan las patrullas de dicha corporación en la ciudad.
Quienes salen a trabajar lo hacen por la necesidad económica, y es que necesitan el recurso para mantener a su familia. Lo poco que ganen es mucho, aunque el temor es latente.
Alexis Luna, quien se dedica al comercio de postres, acostumbra a salir todos los días a bordo de su triciclo para ofrecer pastelitos y flanes a los ciudadanos en la zona centro, sin embargo sus ingresos se han venido a la bjaa ante la complicada situación que se vive en el municipio.
A fin de poder vender algo, anda entre las casas que están abiertas o comercios aledaños al parque ofreciendo su producto, dejando en claro que tiene que salir a vender a pesar del miedo que puede llegar a sentir por la balacera registrada el domingo pasado.
Por su parte, Rufino Sánchez, chofer de transporte, señaló que la situación que se vive es crítica porque no hay pasaje, el pueblo ha estado vacío y desolado, además de que las escuelas que son las que también proporcionan una parte de los ingresos a los transportistas, no están en clases.
Detalló que existe temor de muchos transportistas por salir a la calle, por lo que apenas se logran ver a unos cuantos recorrer la ciudad, además de que antes que anochezca, muchos se van a sus casas.
Luis Alberto, quien es comerciante de un negocio de tacos en el parque central, manifestó que la situación está triste, que ayer todo el día cerraron los comercios, incluso él se tuvo que retirar por su propia seguridad.
Dijo que unas de sus ventas principales son la gente de comunidad que visita la ciudad para realizar mandados o hacer trámites, sin embargo “los carros de las colonias no están viniendo, hay mucho miedo en todo el pueblo y a nosotros la necesidad nos hace salir”.
Por su parte las instituciones de educación de todos los niveles han suspendido labores hasta nuevo aviso, por lo que se prevé que sea hasta la siguiente semana cuando vuelvan a abrir las escuelas, dependiendo de cómo se encuentre la situación para el municipio para esas fechas.