Migrantes, principalmente de Venezuela y Cuba denunciaron que en Tapachula los ven como símbolos de dólares, ya que les quieren vender o cobrar todo al doble de lo que pagan los mexicanos, quienes ocupan los mismo servicios.
Explicaron que la renta, pasajes y hasta la comida se la venden más cara por el simple hecho de estar de manera irregular en la ciudad y creen que desconocen los precios reales de las productos o servicios.
Yei Matías Sánchez, originaria de Cuba, señaló que es injusto lo que hacen los arrendadores, comerciantes y transportistas de la ciudad, quienes les quieren cobrar todo al doble de su precio normal.
Aseguró que en donde vive es un cuarto de cuatro por cuatro metros, sin muebles y le están cobrando tres mil pesos, cuando es lo que cobran por un cuarto semiamueblado en esta ciudad.
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“El cuarto en donde vivimos no tiene las condiciones para que nos cobren esa cantidad de dinero a los migrantes que estamos encerrados, sin poder salir de Tapachula y mucho menos sin trabajo”, expresó.
Pidió a los arrendatarios de la ciudad que no los vean con ojos de dólares, pues a Tapachula llegan sin nada porque todo se lo quitan en Centroamérica.
Malik Masud, africano, acusó que el trasporte público les cobra muchísimo por hacerles un servicio o un traslado dentro de la ciudad, cuando la carrera si mucho es de 70 pesos por más retirado del lugar.
Señaló que a él le pidieron 100 pesos por persona para subirlos a un taxi local y eran cinco personas, lo cual, considero un abuso de las personas que brindan este servicio público.
“Éramos cinco personas, nos estaba pidiendo 100 pesos y por todos teníamos que pagarles 500 pesos mexicanos, esa plata no la traemos los migrantes que ya pasamos nueve o 10 países”, manifestó.
Raúl Urriaga, venezolano, indicó que a él le quisieron vender un plato de comida de 45 pesos en 90 pesos, cuando sabe muy bien cuánto cuesta, ya que sus connacionales que han pasado por esta ciudad le advirtieron los abusos que sufriría en Tapachula.
“Muchos migrantes no queremos pasar mucho tiempo en esta ciudad por los abusos que cometen algunas personas, ya que no todas son iguales, pues yo conocí en este país personas que ayudan mucho a los inmigrantes”, finalizó.