Tonalá.- Las máquinas representaron un gransímbolo para la ciudadanía chiapaneca, incluso funcionaban comotren carguero y de pasaje; en ellas se desplazaban los vagonescargados de productos que eran transportados a sitios como Oaxaca,Veracruz y la Ciudad de México, lo mismo ocurría transportandolíquidos explosivos. Hoy sólo queda el recuerdo de la otroramaquinaria de Ferrocarriles de México.
Estos vagones ahora son “nido” de delincuentes,sirven de sanitario y como vivienda de personas que integran el“escuadrón de la muerte”; desde el año 2005, el huracán“Stan” desapareció parcialmente las vías férreas, y por ellodicho servicio se hizo obsoleto.
A decir de los “turulos”, la “mole dehierro”, bautizada por migrantes como la “bestia”, era elúnico medio de transporte que utilizaban desde la ciudad deTapachula al municipio de Arriaga, que dejó de funcionar a finesdel 2000; “aquí en la estación del tren era algarabía, sehacían fiestas cuando arribaban los trenes cargueros o de pasaje,ya que muchas mujeres acudían a ese lugar para vender susproductos”, recuerda Andrea, vecina del barrio Nicatán.
“Hoy día, la estación del tren en esta ciudadestá abandonada; lo que fue la sala de espera se mantiene llena debasura y es un ‘nido’ de malvivientes centroamericanos, por lasnoches se hace peligroso caminar sobre la avenida Ferrocarril, a laaltura de las calles 16 de Septiembre, Guillermo Prieto, Iturbide,Belisario Domínguez e Independencia”, señala.
En Tonalá, donde se congregaban campesinos yganaderos, fue construida una estación para que los pasajerostransitaran libremente y a pesar de que en ese tiempo arribabancientos de centroamericanos la delincuencia era muy escasa.
“Los jóvenes centroamericanos viajaban en el trenrumbo a la Ciudad de México y Tonalá y Arriaga eran ciudades depaso, pero ahora ya se convirtió en ‘nido’ de delincuentes; enlas máquinas obsoletas se han registrado violaciones sexuales,ahí se pasan los teporochos, día y noche”, dice laentrevistada.
El Ayuntamiento, que encabeza José Luis CastillejosVila, debe de intervenir para rescatar el edificio de lo que fue laestación de Ferrocarril, pues allí se podría construir un museo,un salón de reuniones, una cafetería, una casa de la cultura,entre otros, sugieren algunos lugareños.
Sin embargo, a decir de los propios vecinos, elalcalde sólo “se cruza de brazos y no mueve un dedo” para queeste municipio tenga una nueva imagen, sobre todo en esterubro.