La iglesia católica hizo nuevamente el llamado a la sociedad a no confiarse ni bajar la guardia ante la tercera oleada de contagios del Covid-19, y es que no vacunarse pudiendo hacerlo es un acto irresponsable e insolidario, afirmó en su mensaje dominical el obispo de Tapachula, Monseñor Jaime Calderón Calderón
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El Obispo de la Diócesis de Tapachula dijo que existen numerosas evidencias científicas bien contrastadas sobre la capacidad de las vacunas disponibles para reducir enormemente el riesgo de muerte o complicaciones graves de la enfermedad.
Agregó que en Chiapas y México en los últimos días se ha experimentado un incremento preocupante de los casos de contagios y defunciones por el Covid-19 y su variante «Delta», por lo que es momento de reforzar y amplificar el cuidado personal y comunitario.
Pidió no confiarse ni bajar la guardia, reconoció en ese sentido que, en la vacunación de personas de 18 años en adelante, la respuesta ha sido positiva y muy favorable, por lo que felicitó a todos los jóvenes que han optado por cuidar a los suyos y cuidarse a sí mismos en una actitud que califica de madura y responsablemente.
Asimismo, monseñor Calderón invitó a las parroquiales a elevar oraciones en favor de los hermanos difuntos que han muerto a causa de esta pandemia y a fortalecer el espíritu de intercesión por quienes se encuentran enfermos y a prodigar ayuda a sus necesidades; no se debe dejar a nadie solos a su suerte.
“Ruego a nuestras autoridades civiles una mirada y atención misericordiosa para los hermanos migrantes que deambulan por toda la ciudad; también son seres humanos con derechos y necesitan los cuidados de salud”, abundó.
En torno al tema del regreso a clases, mencionó que es complicado, y la decisión gubernamental de regresar a clases presenciales ha puesto a docentes y a padres de familia en un gran nerviosismo y miedo, en algunas escuelas, las de carácter privado han puesto ya en estrategia modelos educativos: plataforma en línea, modelo híbrido y presencial y reforzado los protocolos de salubridad.
Pero, las escuelas que dependen del gobierno federal y estatal, que son la inmensa mayoría en el país, carecen de estos medios, los centros educativos presentan graves carencias y tienen muy pocos recursos para emprender estrategias idóneas y adecuadas para el momento de crisis de salud como la actual, el obispo reiteró su opinión personal como pastor y ciudadano.
“Son los padres de familia, junto con los docentes, quienes han de tomar las pertinentes decisiones sobre este regreso presencial a clases” e invitó a discernir detenidamente y a sopesar todas las implicaciones y agravantes ante esta decisión", acotó.