Enedina García fue apodada La Bruja más querida y joven en San Cristóbal de Las Casas. Ella nació en mayo de 1876 y murió en el año 1900. Sus restos se encuentran enterrados con sus conocimientos de medicina natural, pero, además, cuenta la leyenda que el día que la última sirena de su tumba caiga, regresará de entre los muertos, algo que la gente no cree, y que se vengará de las personas que hablaron mal de ella.

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Algunos sancristobalenses cuentan la historia de la “Tumba de la Sirena”, lugar donde se encuentra enterrada Enedina García, que es una de las más escuchadas en el Panteón Municipal de San Cristóbal. Desconocidos llevan flores a su tumba, supuestamente para que, desde el más allá, resuelva los problemas que tienen en la familia. La tumba de la “Bruja” es uno de los más de 30 monumentos históricos que existen en el Panteón Municipal. De acuerdo a una placa que se encuentra en su tumba, murió de una enfermedad en febrero de 1900. A sus 124 años de su muerte, sigue su leyenda por miles de coletos.

Al respecto, Fátima Acuña, en entrevista, señaló que, después de su muerte, comenzó la leyenda de la presunta Bruja que actualmente le llaman “La Sirena”. La tumba se encuentra detrás de la iglesia del panteón municipal de San Cristóbal. Los coletos que conocen su historia cuentan que, desde los 24 años, tenía una fortuna producto de su trabajo como “bruja”, y que al fallecer fue sepultada con todos sus bienes y de cabeza.

“Doña Enedina García nació en 1876 y murió en el año de 1900. Se dice que era una mujer guapa, con una carrera preciosa, que se dedicaba a la medicina herbolaria y ayudaba a muchísimas personas. Acudían a ella porque tenían fe en sus medicamentos. Ella no les cobraba, y todas las personas le llevaban algún obsequio con gratitud. Su esposo, Aarón García, le construyó su monumento con sirenas, y es que en su rancho había una sirena. De ahí nace el monumento con sirenas. Así es como pa

sa una historia y nace una leyenda, pero ella se dedicaba a la medicina herbolaria. En algún momento la nombraron la bruja mayor de San Cristóbal, por lo mismo a todas las personas acuden a su tumba para hacer trabajos de brujería, pidiéndole sanidad”, señaló Fátima Acuña.

Agregó que la tumba de Enedina García recibe visitas los 365 días del año. Es muy visitada siempre porque llegan a dejar sus ofrendas en su tumba. Por tal motivo se dice que ella lanzó una maldición; según esto, la sepultaron de cabeza, y hay un tema que se dice que se irán cayendo una a una las sirenas. El día que caiga la última sirena, Enedina García resurgirá del más allá, y quien hable mal de ella, según la leyenda, sufrirá.

Finalmente, al realizar un recorrido en la tumba de Enedina, ubicada en el panteón municipal de San Cristóbal, se observaron ramos de flores, cigarros, botellas de licor, entre otros objetos, esto con la finalidad de pedirle sanidad de alguna enfermedad, o simplemente agradecerle lo que ha hecho desde el más allá. Seguramente en esta temporada del Día de Muertos, aumentarán las visitas dejando obsequios en su tumba, donde descansa desde hace más de 124 años. Otros dejarán velas y veladoras encendidas.

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