A través de proyectos de alto impacto buscan impulsar el turismo y artesanías de la comunidad indígena de esta zona de Chiapas, por lo que autoridades municipales, de derechos humanos, del gobierno del estado y federal integraron el primer comité en el municipio de Cacahoatán.
Con la participación de funcionarios y representantes de la iniciativa privada y de Derechos Humanos y de la ONU, además del “Tata” Esteban Bravo Verdugo, Gobernador indígena Mam del Soconusco se busca atender la demanda de la población y en particular de la comunidad indígena para ser incluida en estos rubros de economía y bienestar que tanto lo necesitan, ante la severa crisis económica que enfrenta México derivado de la recesión y de la pandemia.
Diego Toj, miembro del consejo indígena Mam del Soconusco, reconoció que es un paso importante sobre todo porque se tome en cuenta a la comunidad indígena que ha sido muy marginada y que en ese sentido es una de las que más ha resentido la falta de oportunidades.
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Dijo que la situación es tan lamentable, al grado de que en la actualidad, los jóvenes hijos de padres que habitan en las comunidades indígenas y que aún tienen costumbres y practican la lengua Mam han tenido que emigrar al norte del país y en otras ocasiones buscan incluso llegar a los Estados Unidos en busca de mejores oportunidades de vida.
Asimismo, hizo un reconocimiento al gobierno del estado, la Unach y la Comisión Estatal de Derechos Humanos por la invitación a la “Presentación del estudio sobre la participación de los pueblos y las comunidades indígenas y las personas afrodescendientes y afro mexicanas en la administración pública”, lo que consideró como el principio del cumplimiento a la obligación de la autoridad municipal, estatal y federal de cumplir con el porcentaje de personas indígenas en espacios laborales.
Señaló que en la actualidad ese porcentaje no llega ni al uno por ciento, hay discriminación en los tres ordenes de gobierno, esta región es un claro ejemplo, porque los miembros de la etnia Mam son relegados por esa condición, incluso las plazas para la educación indígena son mínimas a pesar del interés y de la participación de jóvenes con estas características.
Sin embargo, mencionó que hoy se tiene ya un avance y la esperanza de que se cumpla el compromiso y no quede como letra muerta, pues la participación de la ONU es una garantía que además cuenta con el aval de la CEDH.