Cubanos y haitianos vuelven a repuntar en el número de peticiones de refugio ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
Según datos de este organismo dependiente del gobierno mexicano, hasta el cierre de marzo de 2021 la ciudadanía cubana se ubicaba en segundo lugar con 2 mil 490 personas solicitantes, mientras que de Haití la cifra alcanzó los 2 mil 459.
Las mismas posiciones ocuparon durante el primer trimestre de 2020, etapas en las que los hondureños siguen siendo el lugar número uno.
La evidencia está en las calles, el río Suchiate y los puestos de control a donde los haitianos y africanos llegan a entregarse ante el Instituto Nacional de Migración (INM), para iniciar sus trámites de regularización que les permitan el libre tránsito por determinado tiempo en México.
En las oficinas de la Comar, los extranjeros tienen que esperar por horas ( y días) para ser atendidos y dar seguimiento a sus trámites ante esta instancia dependiente del gobierno federal.
Niños, niñas, hombres y mujeres aguardan en las banquetas, porque aquellos que atraviesan la frontera de las instalaciones de la Comar, son corridos hacia calles aledañas bajo el argumento que ni pueden permanecer allí.
Al cierre de marzo de este año se habían contabilizado 9 mil 076 personas con petición de refugio en el país, la mayoría que ingresó por Tapachula.
En 2020 fueron 6 mil 992, es decir, más de dos mil solicitudes en el mismo lapso entre ambos años.
Aunado a esto, Haití pasó de ocupar el quinto lugar en 2019 al segundo sitio en 2020. Lo mismo ha ocurrido con los cubanos.
Para el Alto Comisionado de la Naciones Unidas para los Refugiados ( ACNUR), la situación que prevalece en la frontera sur es preocupante, por eso han tenido que reforzar los programas de apoyo al gobierno mexicano con tal de cubrir en lo posible a la comunidad extranjera en cuestión de techo y sustento durante si estancia en el sur de México.
Este viernes, un grupo de al menos 60 extracontinentales arribó a Ciudad Hidalgo y avanzaron en transporte público hasta la parada denominada El Manguito, donde el INM mantiene vigilancia.
Allí se han entregado para ser llevados ante la instancia regulatoria que pueda ayudarlos a iniciar su procedimiento de estadía en México, con la firme intención de llegar a la frontera norte.
A pesar de la vigilancia militar y migratoria en la frontera con Guatemala, a los extracontinentales no se les detiene porque se entregan para iniciar su procedimiento en el INM o porque burlan ágilmente las revisiones hasta llegar a la Comar.