La Guardia Nacional y la 36ª Zona Militar, mantienen recorridos en carreteras que conectan a Guatemala con Chiapas, para detectar posibles grupos de migrantes que hayan logrado burlar el cerco militar en Centroamérica y se hayan adentrado a territorio mexicano.
Los soldados han reforzado la seguridad en la vía que comunica de Ciudad Hidalgo a Tapachula, pasando por otros municipios como Frontera Hidalgo y Metapa de Domínguez, los cuales también colindan al noreste con el río Suchiate, por donde los extranjeros tienen mucho campo libre para internarse entre matorrales y propiedades privadas de grandes extensiones de terreno.
sobre esta vía, que lleva hacia Tapachula, dos puestos de inspección refuerzan la seguridad con presencia militar y miembros del Instituto Nacional de Migración (INM), mientras que de manera constante se observan patrullas de la GN recorriendo de Metapa a Suchiate, una extensión de al menos 20 kilómetros de autopista.
En la vía hacia el otro puerto fronterizo, Talismán- El Carmen, un puesto de inspección ha sido instaurado para evitar que migrantes utilicen esta ruta en paso hormiga y puedan adentrarse en municipios como Tuxtla Chico, Cacahoatán y Tapachula, para después la ruta hacia en norte del país o alojarse del lado mexicano.
Mientras que en el borde del río Suchiate, otras decenas de militares y guardias migratorios aguardan durante mañana y noche para intentar dar con personas que intenten cruzar por el afluente, que se mantiene en nivel bajo debido a la ausencia de lluvias.
El número de militares ha disminuido, pero la mayor parte que hace unos días se desplegó en este municipio fronterizo, permanece acuartelada en las instalaciones de la base militar situada en la salida hacia Jaritas, en el poniente de Suchiate.
En estas tareas de seguridad apoyan policías municipales y estatales, que también se han desplegado en otros puntos de internamiento a territorio nacional, mientras que grupos nutridos de migrantes han llegado a Tecún Umán en busca de cruzar a Chiapas.