Pueblos indígenas de al menos 22 municipios del norte del estado, entre ellas, las Abejas de Acteal, ligadas con las bases zapatistas, demandaron al Estado mexicano la cancelación de la mina “Santa Fe” instalada en Solosuchiapa, para la explotación de oro, plata, cobro y zinc, que está generando contaminación ambiental, daños a la salud y muerte de especies de fauna, principalmente aves.
El presbítero Marcelo Pérez Pérez, asesor de la Pastoral Social de la Provincia Eclesiástica de Chiapas y párroco de Simojovel, de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, explicó que la marcha-peregrinación es apenas la primera etapa de la movilización para exigir la suspensión del proyecto.
La concentración inició a las nueve de la mañana en la cabecera municipal de Solosuchiapa de donde partieron unas mil personas portando las banderas misioneras y el estandarte de la virgen de Guadalupe, hacia la comunidad Beneficio, donde se ubica la mina.
Enfatizó que el reclamo es que el gobierno federal a través de las secretarías de Hacienda, Economía, Medio Ambiente y Energía, la cancelación definitiva de la mina, donde la empresa Minera Frisco presenta una fuerte actividad, el sitio está vigilado, la entrada está restringida y se prohíbe el paso.
Pérez Pérez abundó en entrevista que no habrá un retroceso en la exigencia, se trata de la defensa de la madre tierra, las tierras deben quedar libres de la actividad minera, la población infantil presenta problemas respiratorios derivado de la contaminación del aire.
Reiteró que a este reclamo de Solosuchiapa se han unido los pueblos y comunidades de los municipios de Rayón, Ixhuatán, Tapilula, Rincón Chamula San Pedro, Ixtacomitán, Chapultenango, Amatán, Huitiupán, Simojovel y Francisco León, y hubo solidaridad de parte de Chicomuselo, donde el gobierno de Juan José Sabines Guerrero, canceló la mina de la empresa canadiense Blacke Fire.
A la vez, se sumó el Movimiento Zoque en Defensa de la Tierra conformado por comunidades de Yajalón, Oxchuc, Huixtán, San Juan Cancuc, Tenejapa, Ocosingo, Altamirano, Chilón y Sitalá, así como Las Abejas de Acteal municipio de Chenalhó, la fuerza de los pueblos indígenas de es evidente, desaprueba el proyecto de extracción mineral.
El llamado a la comunidad nacional e internacional es sumarse a la defensa de la madre tierra, porque de continuar con este proyecto de extracción pondrá en mayor riesgo el medio ambiente, ya es evidente el daño a los manantiales