Aun cuando no hay municipios indígenas solicitando elección de sus autoridades municipales por los sistemas normativos internos, Oxchuc que realizó elecciones haciendo uso de su libre autodeterminación, en abril del 2019, es un referente histórico para los pueblos indígenas de México y de Chiapas.
La maestra y abogada indígena originaria de ese municipio, Alma Roció Sántiz López, cuenta que, si falta un semestre para el inicio del proceso electoral local 2021 para las elecciones del 6 de junio del próximo año, sostiene que ese territorio es también referente para las autoridades de Chiapas porque macó un punto de inflación en cuanto al ejercicio de los derechos políticos de los pueblos indígenas.
El camino para Oxchuc no fue fácil, comenzó en el último trimestre del 2016 y fue hasta el 13 de abril del 2019, cuando pasando por los tribunales electorales de Chiapas y del país, pudieron realizar sus elecciones al margen de los partidos políticos.
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Narra que las comunidades indígenas pasaron por serios obstáculos para el ejercicio de sus derechos como negación en un primer momento del Instituto de Elecciones y Participación Ciudadana (IEPC) por no estar regulado el derecho, previo a la sentencia del 28 de junio del 2017 por parte del Tribunal Electoral del Estado de Chiapas.
Sugiere un amplio análisis y reflexión del proceso seguido en Oxchuc para casos futuros, el proceso de consulta solicitado por comunidades indígenas de Chilón y Sitalá se iniciaron en el 2019 pero se suspendieron primero por falta de seguridad para los investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia que realizaban el estudio cultural y luego por la pandemia de coronavirus.
Sin embargo, aclara que fue muy doloroso para los habitantes de Oxchuc migrar del sistema de partidos políticos a los usos y costumbres para elegir autoridades municipales, se inició lamentablemente por el rechazo a las autoridades municipales electas el 19 de julio del 2015, la quema de casas, quema de automóviles, el asesinato de varias personas y las lesiones de otras.
Oxchuc pasó de ser un conflicto postelectoral a un movimiento social para poder materializar su autogobierno, reconocido de manera expresa, a la vez, visibiliza la brecha que existe entre los derechos de autogobierno y la libre determinación de los pueblos indígenas y la realidad.
Sántiz López afirma que las leyes, los tratados y las jurisprudencias no fueron suficientes para garantizar el ejercicio de los derechos de las comunidades, de ahí que se tuvieron que judicializar para materializarlos, en gran parte por la falta de regulación procedimental y los vacíos legislativos en Chiapas.
Sostiene la investigadora indígena que las reformas electorales efectuadas por mayoría por el Congreso del Estado el pasado 26 de junio por la noche no son suficientes para garantizar a plenitud los derechos indígenas y hay que perfeccionarlas.
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