El Comité de Agua Potable y Alcantarillado de Tapachula (COAPATAP) tiene una morosidad de 226 millones de pesos por la falta del pago del servicio que brinda este organismo, indicó su director general, Julio Armando Cano Aranda.
Explicó, que este adeudo está distribuido en todos las colonias y diferentes negocios que están establecidos en la ciudad, sin tener un foco específico de en donde se acentúa esta problemática.
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Comentó que la falta de pago afecta la operatividad de este organismo que vive de lo recaudado a través de los recibos que llegan a todos los domicilios de los tapachultecos, el cual reciben cada mes.
“Nuestro servicio de repente no llega con la calidad o cantidad necesaria por la morosidad que se tiene, sin embargo, nosotros tratamos de que no sea así y se trabaja para hacer más con menos, como lo ha ordenado la presidenta de Rosy Urbina”, expresó.
Destacó, que con el dinero que les deben se podría mejorar la captación de agua a través de los pozos, el mejoramiento de la planta potabilizadora ubicada al norte de la ciudad y mejorar los circuitos para restablecer la presión del agua.
Añadió, que por el crecimiento de la población hay varios circuitos que se deben mejorar, ya que eso permitiría tener sectores adecuados mediante válvulas específicas, estudiadas y en puntos necesarios para que el agua llegue con presión.
Mencionó, que se mantiene una gestión con el Gobierno Federal y Estatal para poder aterrizar un proyecto de varios millones de pesos de parte de la presidenta para mejorar el sistema de agua potable.
“Como organismo o institución estamos haciendo lo nuestro para que lo que nos corresponda a nosotros siga fluyendo la elaboración del proyecto, sin embargo, hay estudios que deben realizar especialistas”, abundó.
Detalló, que del total del adeudo el 80 por ciento vienen del ejercicio de 2018 para atrás y ya se está buscando el diálogo con los deudores, ya que el área comercial está de puerta abierta para escuchar y buscar reducir el adeudo que se tiene.
Reveló, que en los adeudos que tiene el COAPATAP también tuvieron que ver los migrantes en tránsito, ya que varios rentaron casas en diferentes colonias y fueron grupos numerales que vivían hacinados, lo cual, dispararon el consumo del agua y se fueron dejando los adeudos a los propietarios de las viviendas.
Puntualizó, que el COAPATAP está abierto al diálogo y a transparentar lo que se realiza en beneficio de la población, pues fue la encomienda que le encargaron cuando lo nombraron nuevo director del organismo.
Cabe hacer mención, que administraciones anteriores han evidenciado que existen muchos negocios, como restaurantes y hoteles del centro de la ciudad que llevan de morosos muchos años, lo que también es un tema que genera un detrimento a las finanzas de este organismo operador del agua.