Ocozocoautla.- La Preparatoria número 1 abrió suspuertas en un día en el que están en receso de semestre, sinembargo la ocasión no fue para regresar a las aulas, sino paradespedir a quien en vida formó parte de esta casa, a la queincluso dirigió, y que tuvo que partir de este mundo tras unaccidente.
Tras salir de la misa en la iglesia de San JuanBautista, el ataúd que llevaba los restos de la maestra MaríaMagdalena de la Cruz Hernández emprendió su paso junto con lamultitud que la acompañaba, en su despedida.
Cerca de las 10:30 horas, el cuerpo de la exdirectorallegó a las instalaciones de la Escuela Preparatoria 1, la que fuesu casa por muchos años, y en donde la esperaban con lágrimas susamigos, alumnos, exestudiantes, personal docente y administrativo,todos se reunían allí para decirle “hasta siempre”.
La carrosa fúnebre se estacionó a las afueras de lainstitución para ser recibida por sus compañeros y amigosmaestros, quienes cargaron su cuerpo hasta la plaza cívica, esa enla que alguna vez con sus palabras alentó a los alumnos yaconsejó cada lunes en su mensaje a quienes formaban parte delcentro educativo.
El ataúd fue llevado por sus amigos maestros, y unpasillo largo de estudiantes se formó desde la entrada hasta elcentro de la escuela, con flores blancas en manos, en señal de unluto profundo.
Las palabras de despedida por parte de los profesoresconmovieron a los presentes, no creían que se fuera tan pronto,anhelaban su presencia, afirmando que dejaba un enorme vacío en laescuela, porque fue amiga de muchos y ayudó a hacer mejor a lainstitución.
Federico Cinco Morales, maestro de la institución yquien fuera su amigo, describió parte de la vida de la profesoraMagda, como muchos la conocían: “Una mujer nacida en cunahumilde que, a través de su inteligencia y capacidad logró saliradelante hasta llegar a ser directora de la escuela que lo vioegresar”.
Fue el hermano de la profesora el que agradecería elapoyo de todos los amigos y familiares, diciéndose orgulloso dehaber compartido con ella momentos inolvidables, como muchaspersonas también lo hicieron.
Los aplausos se hicieron escuchar al unísono alfinal de la ceremonia de homenaje y despedida, y entre llantos dedolor, despedían a la maestra “Magda”, en su camino alpanteón, en su camino a la otra vida.