Miembros de la caravana migrante buscan burlar el cerco de seguridad que este viernes ha montado el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Guardia Nacional.
Ambas corporaciones del orden federal, hicieron una “demostración” del brazo de fuerza con el que los migrantes de toparían si llegan a la frontera con Ciudad Hidalgo, donde este día unos 350 guardias migratorios y un millar de la GN se han parado para “ensayar” la manera en que colocarán el muro de contención para los migrantes.
La caravana se ha segmentado hasta en tres partes, la noche de este viernes. Uno de los grupos se ha encaminado hacia El Petén, otro toma curso hacia Tecún Umán.
Mientras que un tercer grupo marcha desde la frontera El Corinto, donde una valla humana de la PNC impide su paso.
La caravana que se encamina hacia la zona de Tapachula aún está a unos mil kilómetros de la frontera con México.
En El Petén, momentos de tensión se viven Tensión en la comunidad conocida como La Cuarentena, entre fuerzas de seguridad y los integrantes de uno de los grupos de hondureños, a los que se les ha negado el paso hacia la zona fronteriza.
A las 19:00 horas, los extranjeros decidieron descansar en este punto ante la negativa de las autoridades por dejarlos pasar.
Este sábado, los patrullajes por parte de la Guardia Nacional persistirán en la franja fronteriza, mientras casco urbano adentro las corporaciones policiacas mantienen también tareas de vigilancia.
Un halcón migrante
“Cheque” ha llegado a Ciudad Hidalgo con una mochila en mano y una camiseta “pirata” de la selección mexicana. Se quiere camuflar como ciudadano de este país.
Pero el hambre aprieta y se le acabado el dinero, tiene que recurrir a la limosna. Su cometido, apenas descrito por él, es informar la condición en que se encuentra la frontera.
Viene mucha gente, pero para poder saber qué harán hay que hablar con uno de los líderes
“Viene mucha gente, pero para poder saber qué harán hay que hablar con uno de los líderes, hay que esperar para ver qué hacer, porque están planeando pasar sin que se sepa aquí”, apuntó.
El hondureño afirma que la caravana podría tomar otra ruta en cualquier momento, por el momento la preocupación es librar al ejército de Guatemala y los policías, que asedian a los grupos de migrantes que se descuidan, para retenerlos y remitirlos ante las autoridades migratorias.
“No se van a dejar agarrar, por eso están buscándole por dónde entrar, no necesariamente tiene que ser por aquí (Suchiate), finalizó.