Ostuacán.- Las constantes precipitaciones en la región ha elevado el nivel del agua en la presa Peñitas, por lo que a fin de evitar daños en la estructura se han tenido que ir desfogando grandes cantidades de agua para que siga su curso sobre el río Grijalva, así lo informaron autoridades de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA).
De acuerdo a datos oficiales, el pasado viernes 31 de octubre se tuvo que hacer un desfogue de 800 metros cúbicos por segundo, esto por protocolo de operación de la CFE.
Mientras que para el domingo el número se redujo a 700 metros cúbicos por segundo, de tal manera que para la madrugada del lunes el desfogue bajó 100, pues fue de 600.
Sin embargo para el mismo lunes por la mañana, volvió a la cifra del sábado de 800 debido a que las precipitaciones aumentaron el nivel del agua, y por ello tuvieron que lanzar tal cantidad del vital líquido.
Finalmente de acuerdo al último informe de monitoreo efectuado por las autoridades, se sabe que actualmente la presa Peñitas tiene un 82 por ciento de llenado respecto al nivel máximo Ordinario.
Por su parte la presa Nezahualcóyotl también conocida como Malpaso presenta un nivel del 88 por ciento, situación que se no veía en los últimos años, pues este aumento por las constantes lluvias se ve reflejado en los embalses como en el Dique, en donde el nivel del agua está muy por encima de lo normal.
Asimismo el aumento de agua es notorio para los visitantes que acostumbran a ir en lancha hacia la antigua iglesia de Quechula, misma que se encuentra debajo del agua en esta temporada.