La basura, por décadas y en casi todos los municipios del estado ha sido un problema de salud pública que ha costado erradicar, y en la región valle no es la excepción.
Preguntando a los que saben, nos enteramos que en Jiquipilas dos camiones compactadores se encargan de recolectar cerca de 20 toneladas de basura de forma diaria, (de lunes a sábado). En los ejidos, los habitantes se encargan de quemar sus desechos porque los camiones no llegan por la lejanía de estos.
Puedes leer: Apartar lugar en la calle puede salirte caro, estas son las sanciones
En Cintalapa, son cuatro unidades que hacen este trabajo, (tres compactadores y un volteo), todos los días recogen entre 40 y 50 toneladas de basura, se depositan en el sitio de disposición final y se compacta con una retroexcavadora que se tiene trabajando de forma permanente.
En ambos valles, los desechos se mezclan con arena para evitar que se incendie por los gases que la misma basura almacena, pero aun así, se han presentado fuertes incendios derivado de la gran cantidad de desechos que se encuentran ahí.
En las colonias cintalapanecas Lázaro Cárdenas, Emiliano Zapata y Francisco I. Madero también pasa el camión recolector. A Cárdenas cada viernes llegan a recogerla, en las otras dos, cada 15 días.
En el Triunfo de Madero, la misma localidad tienen su camión recolector y ellos llegan a dejar al basurero público, en los demás ejidos y por la lejanía de la cabecera municipal, cada habitante sabe qué hacer con sus desechos.
Donde si hay problemas serios con este tema es en Ocozocoautla porque no existe la cultura de poner los desechos en su lugar, ni de sacarla a la hora que la campana suena.
Desgraciadamente los locatarios han abonado mucho para que el mercado esté en las condiciones insalubres que se encuentra, de igual forma, en los barrios Unión Hidalgo y Barrio Nuevo siempre han representado un problema de salud pública por la tanta basura que producen y que muchas veces tiran en la vía pública, generando en tiempos de agua, un taponamiento en las alcantarillas e inundaciones en barrios de la zona baja, este problema ha sido la demanda añeja de la población y no se le ha dado la importancia que debería.