Para poder cumplir con el esquema de vacunación de sus hijos, padres de familia están gastando un promedio de mil 500 a los 2 mil 600 pesos para proteger la salud de sus menores
La vacuna más cara que del esquema de vacunación primario es la Pentavalente que protege a los menores de la difteria, tosferina, tétanos, poliomielitis e infecciones producidas por Haemophilus Influenzae tipo b y tiene un costo de 800 a 900 pesos.
La vacuna BCG que protege contra tuberculosis oscila entre 400 o 600 pesos, la DPT que inmuniza contra Difteria, Tosferina y Tétano esta entre los 800 a los 900 pesos.
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Las fuentes consultadas mencionaron que el gasto es por dosis, es decir que si para las infecciones de neumococo son tres dosis, los padres tienen que gastar esa cantidad de dinero a los dos meses, a los cuatro y a los 12 meses.
La otra vacuna que se aplica al año y el refuerzo a los seis años es la triple viral, la cual, tiene un costo de 600 pesos actualmente en las clínicas particulares.
En total los padres estarán invirtiendo en la salud de sus hijos por la escasez de los biológicos en los centros de salud y el Instituto Mexicano del Seguro Social un promedio de 2 mil 600 pesos.
Los trabajadores de la salud aseguran que la escasez se agudizó desde que apareció el coronavirus, pues la atención de sector salud se volcó a esa enfermedad que provocó miles de muertes.
Destacaron que la vacuna es un derecho universal y que actualmente el gobierno federal y estatal no está cumpliendo con la población por la escasez de los biológicos del cuadro básico.
En México se cuenta con cinco esquemas de vacunación, el primero es el de los niños que van de los cero a los 9 años, le sigue el grupo de los adolescentes que va de los 10 a los 19 años, luego la cartilla de la mujer que va de los 20 a los 59 años, la cartilla del hombre que va de los 20 a los 59 años y luego la cartilla del adulto mayor de 60 años en adelante.