Ante la política de contención y disuasión implementada por el Gobierno de Guatemala, la migración “hormiga” como lo han mencionado grupos que estudian estos flujos de personas, ha aumentado un 300 por ciento en el último año, por lo que alrededor de 60 mil migrantes de diferentes nacionalidades aún se encuentran varados en Tapachula, sin acceder a un empleo, tampoco se encuentran por ahora, en las posibilidades de seguir con el sueño americano.

El representante del Centro de Dignificación Humana, Luis García Villagrán, afirmó que este tipo de migración continuará ejerciéndose en la frontera sur, debido a que Guatemala y México, han frenado la intención de buscar el suelo estadounidense a través de caravanas masivas.

Precisó que la migración no se podrá detener nunca, ya que miles de migrantes cada año, seguirán intentando cruzar la frontera sur de México, debido a que en sus países de origen sufren de pobreza y la violencia generada por los grupos de pandillas y de la delincuencia organizada.

Puntualizó en que con la nueva política impuesta por el presidente de Estados Unidos Joe Biden, no cambiará mucho la situación que viven miles de migrantes que cada año, intentan el sueño americano, dado que las políticas migratorias no se han transformado y se duda que en los siguientes meses surja un cambio.

Por otro lado, indicó que debido a diversas circunstancias y trabas en el proceso legal de parte del Instituto Nacional de Migración, en Tapachula, hay más de 5 mil cubanos que para continuar hacia el norte del país en la búsqueda del sueño americano, tienen que pagar entre 60 y 80 mil pesos, para realizar sus trámites migratorios ante el INM ante la imperante corrupción en esa dependencia.

Otros buscan a través de la COMAR el estatus de refugiados, cuyo trámite es tardado y manipulado, para continuar su camino hacia los Estados Unidos, por lo que, al no tener una respuesta, continúan varados en Tapachula, sufragando sus gastos, a través de familiares que viven en la unión americana.

Agregó que quienes no tienen posibilidades de seguir avanzando al interior del país, muchos cubanos se hacen de una inversión y ponen bares y cantinas, aun cuando las leyes no lo permiten, y de esta manera se ha incrementado el número de ficheras, sexo servidoras y meseras, de origen cubano en hasta un 40 por ciento.

Burlan a la GN y cruzan a México

“Mínimo que no salga mi cara”, pide un hombre que encabeza a un grupo de al menos 10 hondureños que ha cruzado esta tarde por el río Suchiate, debajo del puente que divide a las comunidades Talismán (México)- El Carmen (Guatemala).

Este punto fronterizo no es vigilado por ninguna autoridad mexicana ni guatemalteca. Todo el circo mediático de la Guardia Nacional (GN) y el Instituto Nacional de Migración (INM) se ha mantenido en Ciudad Hidalgo, mientras que en Talismán, es un paraíso idóneo para el paso de extranjeros, mercancías y la operación de ilícitos que a nadie importa..

La escasez de lluvias ha originado que el río adelgace en un cauce y permita la formación de dunas que son exploradas por los migrantes, que han hallado esta ruta como la manera más práctica de burlas a las autoridades mexicanas.

Uno de los cargadores de mercancía observa la labor periodísticas y, lejos de enfadarse, pregunta si ahora sí ya llegaron los soldados para frenar su paso. Pero nada de esto ocurre, quien quiera y a la hora que sea puede transitar por esta vía que para los gobiernos de López Obrador y Gimmattei Falla, no está en el mapa y no es necesario cuidarlo.

Los balseros de Talismán, los que viven debajo del puente internacional, reportan un incremento en el cruce de personas provenientes de Honduras.

“Aquí rápido se sabe de dónde viene la gente, pa´dónde van, se distingue en la forma de vestir y hablar, cuando son guatemaltecos los sabemos y si han seguido pasando, pero han pasado muchos hondureños en la última semanaç2, afirma uno de los balseros.

Arriba del puente, pero del lado guatemalteco, algunos militares de ese país coordinan acciones de seguridad, pero tampoco revisan quiénes ingresan o salen por esto caminos de extravío que llevan como primer punto al municipio de Tuxtla Chico, después Tapachula, donde hay al menos dos volantas de inspección colocadas por el INM.

Guatemala ha reportado que siguen en la búsqueda de migrantes de la caravana que fue dispersa hace algunos días, mientras los extranjeros buscan maneras de salir de Centroamérica, a donde han prometido no regresar.

Eduardo Torres | Diario del Sur