Por mandato de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) del 2007, este 15 de octubre se conmemora el Día Internacional de las Mujeres Rurales, que de acuerdo con Asociación Nacional de Mujeres Empresarias del Campo (ANMEC) representan el 43 por ciento de la fuerza laboral en las empresas rurales.
La presidenta de la ANMEC, Juana García Palomares, explica que lamentablemente las mujeres rurales han sido excluidas de los programas gubernamentales, se limita el financiamiento para acceder a programas de desarrollo, a los esquemas de capacitación, a la creación de empresas rurales, la lucha de las mujeres ha sido solas.
Chiapas es el tercer estado del país con más núcleos agrarios, 3 mil 212, de acuerdo con el Registro Agrario Nacional (RAN), sin embargo, a la mujer se limita el acceso a la tenencia de la tierra, muy pocas llegar a ser ejidatarias, o posesionarias, derivado de ello, no hay aspiración a desempeñar el cargo de comisariadas ejidales o agentes municipales.
En el municipio de Berriozábal, donde radica García Palomares, solo son tres agentes municipales de un universo de casi 60, no se ha cumplido en los ejidos con la paridad de género en los cargos de representación, prevalece el poder del varón en la designación de estos en las asambleas ejidales.
Narró que esta realidad no es actual, aunque las mujeres realizan una extraordinaria labor en la producción de alimentos de origen animal y vegetal, generan sus propios empleos aunque pocos se les reconoce, aportan ingresos a su familia y a las empresas rurales y contribuyen al bienestar de su familia.
Durante una reunión con mujeres y hombres en Berriozábal, García Palomares sostiene que es lamentable que siendo la mujer el 51.2 por ciento de la población nacional y estatal se le sigue restringiendo su derecho a la tierra, además, son ellas mismas las que han impulsado su propio proceso de capacitación.
En el campo de México han desaparecido lamentablemente instituciones estratégicas como la Compañía Nacional de Subsistencias Populares, Fertilizantes Mexicanos, Banco Rural, Aseguradora Agrícola Mexicana, Productora Nacional de Semillas, Instituto Mexicano del café, que representaba una oportunidad de atención al campo.
Tras el análisis de la realidad actual de las mujeres campesinas, el compromiso es no dar un paso atrás en la lucha para buscar condiciones de vida de sus familias, los procesos de producción agropecuaria a partir de una capacitación, el impulso de la producción orgánica, sustentable, sostenible y la comercialización de sus productos.
Se acordó impulsar una estrategia de información para que las mujeres conozcan sus derechos, juntas las sigamos exigiendo, ejerciendo, las limitaciones, las complejidades, ni nos desalientan, ni nos limitan, un campo sin las mujeres no sería igual, una gran fuerza extraordinaria y visible son las mujeres en las comunidades indígenas, que con su trabajo contribuyen a la sustentabilidad, a la paz y a la gobernabilidad.