Tras la marcha feministas, las casi 3 mil mujeres llegaron al parque central de Tuxtla Gutiérrez en donde un grupo derribó con marro el cerco de madera del acceso principal al Palacio de Gobierno, además rompieron cristales y prendieron fuego a la madera mientras la multitud gritaba: "¡Sí se puede, si se puede, somos malas y podemos ser peores!"
Durante la marcha el contingente de mujeres recibió la solidaridad de algunas empresas (ya sea por sumarse en realidad a la lucha contra la violencia o para proteger a su empresa) ya que les regalaron alimentos, agua, café, pizza, personal femenil de las mismas empresas solidarias fueron los encargados de repartirlos. A pesar de esto luego de la marcha en la que caminaron al menos 4 km, grupos de mujeres dejaron en su paso una estela de destrozos en agravio de empresas.
Mientras que la gente salió a las calles, muchas personas solidarias portando camisas o playeras del mismo color que las manifestantes (morado), también algunos comercios se unieron a la lucha y pegaron en su fachada distintas pancartas con mensajes de apoyo mientras que otros comercios definitivamente bajaron sus puertas para no ser víctimas de las manifestantes.
Entre los inmuebles públicos que fueron víctimas se encuentra la Rectoría de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (UNICACH), al igual que una oficina del Poder Judicial, la delegación de Infonavit, así como algunos bancos.
En la marcha habían elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana con armas pero solo se mantenían como espectadores, mientras que algunas empresas víctimas de la marcha fueron agencias de autos, farmacias, bancos, entre otros.
Ya en la Plaza Central realizaron un mitin exigiendo un alto al feminicidio, mientras que con su celular iluminaron la plaza, luego poco a poco comenzaron a dispersarse, mientras seguía el clamor de justicia y de un sistema de procuración y administración de justicia que cuide, proteja, defienda y garantice la seguridad, así como el acceso pleno de la justicia hacia las mujeres y a los familiares de las víctimas.