Las tomas de aguas clandestinas representan pérdidas millonarias a la administración municipal, tan sólo hace dos años el Comité de Agua Potable y Alcantarillado de Tapachula (Coapatap), detectó dos mil tomas clandestinas; sin embargo, la supervisión no concluyó, se supone que esta cifra es sólo un subregistro de la dimensión del problema.
Se supo en ese momento que las descubiertas fueron principalmente en negocios, donde se utilizan dos tipos de tuberías: una formal y una clandestina; esto para disfrazar el consumo que realmente generan y, por lo tanto, representa una disminución en ingresos para este organismo.
Otra estrategia ilegal es en los domicilios, principalmente del sur de la ciudad, que se mantienen –supuestamente– en resistencia de no pagar el recibo de agua; una vez que llegan los empleados del Coapatap a cortar ese servicio, lo vuelven a reconectar. Otros más no hacían el contrato por los altos costos que se tenían en el trienio pasado.
El director general del Coapatap, Luis Eduardo Guizar Cárdenas dijo que el problema es complejo porque no se sabe con exactitud cuántas tomas son clandestinas, ya que además de los más de 70 mil usuarios que están en el padrón, hay un rezago en el pago de al menos un 40 por ciento.
Mencionó, que aquellos que tienen tomas clandestinas pueden acercarse a cualquier sucursal de Coapatap o las oficinas centrales para regularizarse; puesto que existen facilidades para que ellos puedan hacer los pagos y con ello evitar cortes del suministro.
Se emprendió un programa al usuario para que se regularice, dándoles facilidades de pago; en los últimos cuatro meses, se han registrado 800 nuevos contratos
Luis Eduardo Guizar Cárdenas
Director del Coapatap
2 Mil tomas clandestinas detectadas hasta el momento por el Comité