Este martes cerca de 300 personas indígenas de la comunidad de Santa Martha municipio de Chenalhó marcharon en Tuxtla Gutiérrez en demanda de justicia, fueron desplazados el 29 de noviembre del 2022 y no han contado con las garantías para el regreso a sus hogares, tampoco aparecen cinco personas, no hay evaluación de daños ni la reparación de los mismo, así lo explica el defensor de derechos humanos, Reinaldo Pérez Pérez.
En conferencia de prensa durante la marcha desde el parque cinco de mayo a la plaza central de Tuxtla Gutiérrez, dijo que han seguido las agresiones y las amenazas, además de las cinco personas desaparecidas, siguen las persecuciones, hay amenazas de muerte y hay temor de que se repitan las masacres que se han registrado históricamente en la región Altos de Chiapas.
Revela que el domingo 21 de enero de 2024 nuevamente usaron una estrategia de agresión los lideres comisariados en la localidad indígena de Santa Martha municipio de Chenalhó para atacar los familiares que se habían quedado en sector Santa Martha pero que son víctimas de desplazamiento interno forzado, y solicitan a los tres poderes del estado su intervención, basta de violencia.
Narró que siguen las agresiones armadas, siguen las persecuciones y el temor se apodera de las familias que no tienen alimentos, ni seguridad, viven en condiciones inhumanas en un campamento en la localidad de Polhó municipio de Chenalhó, lamentablemente la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas no ingresa a la zona, tampoco hay información de la Fiscalía General del Estado, ni de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, estamos en completo abandono por parte de los gobierno.
Cada paraje se organiza y los que tienen arma de fuego las utilizan para agredir a las familias que son víctimas de la violencia, de la desaparición forzada, de la inseguridad y del despojo, han tenido que dejar sus hogares desde el 29 de septiembre del 2022, ahora las familias que habían quedado en esa localidad son hostigadas para salgan del lugar, expone el defensor, las agresiones siguen y nadie para a los agresores.
Indicó que en aquel año salieron por agresión armada un total de 68 familias con un total 272 personas, que ahora la mayoría se encuentran refugiados en un campamento en la localidad Polhó municipio de Chenalhó, las familias marcharon en Tuxtla Gutiérrez debido a que siguen siendo hostigadas, amenazadas y perseguidas, y el temor es a sufrir la pérdida de vidas humanas.